Los consejeros de Cultura piden estar en los patronatos del Prado y el Reina Sofía

La participación de las autonomías en los patronatos de los museos del Prado y Reina Sofía, así como de la Biblioteca Nacional, es uno de los principales asuntos que ayer abordaron los consejeros de Cultura de 16 de las 17 comunidades, quienes por primera vez -por lo menos en número tan significativo- se reunieron con el ministro de Cultura en Madrid.

La convocatoria de la sesión había sido realizada por el Ministerio de Cultura, cuyo titular, Jordi Solé Tura, no ocultaba ayer su satisfacción por el quorum conseguido. La única ausencia era la del consejero de Cultura vasco, Joseba Arregui, quien se encontraba de viaje fuera de España. Por contra, entre los asistentes se encontraba el consejero catalán Joan Guitart. Este, en unas recientes declaraciones a este diario (ver EL PAÍS del pasado domingo) criticó la existencia del ministerio como tal. Ayer, sin embargo, en la comparecencia ante los medios informativos todo fue armonía y concordia.Guitart advirtió, a preguntas e los periodistas, que a la reunión no había ido para hablar de la oportunidad o no de la existencia del ministerio. "Una cosa son las consideraciones políticas y otra la vida cotidiana", dijo el consejero catalán.

Por tanto, problemas políticos aparte, lo que ha quedado en pie de la reunión de ayer es la creación de una serie de comisiones de expertos que abordarán temas como la catalogación de bienes culturales, auditorios y teatros públicos, unificación de. registros en lo que a ley de propiedad intelectual se refiere y, por supuesto, la participación autonómica en los patronatos de los dos grandes museos nacionales que se encuentran en Madrid. De llevarse a buen término el proyecto, parte de los fondos del Museo del Prado que están actualmente almacenados por falta de espacio, podrían repartirse entre diferentes ciudades españolas. Según Solé Tura, la herencia artística española es patrimonio de las diferentes regiones.

Oportunidad

Otro tema tratado ayer fue la aplicación de la futura Ley de Mecenazgo, actualmente en trámite parlamentario. A este respecto el ministro insistió en la oportunidad que representa la ley para que sean las comunidades autónomas las que definan los programas de interés cultural que sean desgravables, tal como establece el articulado del proyecto.Los consejeros de Cultura de toda España volverán a reunirse en los próximos meses -unos cinco, según declaró el subsecretario de Cultura, Santiago de Torres- en Valencia.

La satisfacción del ministro era evidente y no era de extrañar, habida cuenta del eco que ha encontrado su convocatoria, una de las de mayor éxito que se recuerdan. Incluso, fuentes del ministerio llegaron a señalar que se trataba de la primera de estas características.

Quizá la síntesis sobre el interés de la reunión de ayer la expresó el consejero de Cultura de Castilla-La Mancha, Juan Sisinio Pérez, quien recordó que mientras los presupuestos del Ministerio de Cultura ascienden a unos 50.000 millones de pesetas en las 17 comunidades autónomas se invierten más de 300.000 millones anualmente.