Cerrojazo indefinido a los cuatro teatros de la Expo tras los grandes estrenos del 92
Sevilla se queda con 7.600 butacas vacías por indefinición política y problemas laborales
Ninguno de los cuatro espacios escénicos que han albergado los espectáculos más importantes de la Expo tiene su futuro resuelto. En pleno inicio de la temporada 1992-1993, Sevilla se ha quedado con 7.600 butacas vacías, 6.900 de ellas de nueva creación. Luchas políticas, problemas burocráticos y de indefinición del proyecto Cartuja 93 y conflictos laborales son algunas de las causas del cerrojazo indefinido de los teatros de la Maestranza, el Auditorio, el Lope de Vega y el Central. Tras acoger grandes montajes, como) el Ulises y la ballena blanca, de Vittorio Gassman, o La Traviata, del Teatro de la Scala de Milán, los escenarios se han quedado mudos.
La Expo ha destinado cerca de 18.000 millones de pesetas para espectáculos. Frente a esta abultada cantidad, entre todas las instituciones no podrán dedicar les ni 2.000 millones en 1993. El teatro de la Maestranza, el único espacio escénico español construido especialmente para la ópera, no tiene aún director, ni programación, ni presupuesto, ni personal. Y todo a pesar de que las tres instituciones que forman el consorcio -Junta de Andalucía, Ayuntamiento y Diputación de Sevilla- encargado de nombrar al nuevo consejero delegado tras el final de la Expo llevan discutiendo sobre el tema los últimos siete meses. El tenor Plácido Domingo, asesor lírico de, la Expo, se ofreció "desinteresadamente" para continuar su labor en la Maestranza, aunque hasta el momento las instituciones han acogido con cautela la oferta del tenor porque desconfían de la gratuidad y el desinterés del ofrecimiento.
De momento, el consorcio espera la contestación de José Manuel Garrido, director adjunto del pabellón de España en la, Expo y ex subsecretario del Ministerio de Cultura, a la propuesta que recibió el pasado 9 de octubre para hacerse cargo del teatro.
Garrido es el único candidato propuesto por la Junta y la. Diputación, ambos de mayoría. socialista, que ha aceptado el, Ayuntamiento, gobernado en coalición por el Partido Andalucista y el Partido Popular, a pesar de que "tiene carné del PSOE", según puntualizó el alcalde de Sevilla, Alejandro Rojas-Marcos. Luego vendrán los presupuestos y la nueva programación, que, en opinión del mundo de la lírica, no podrá contar a estas alturas con ninguno de los grandes nombres en 1993.
Lo único que está perfilado es, el presupuesto, que, según la concejal de Cultura del Ayuntamiento de Sevilla, Enriqueta Vila, rondará los 800 millones de pesetas para 1993. Entre las tres, instituciones pagarán 500 millones, y el resto lo aportará la Orquesta Sinfónica de Sevilla, nueva inquilina fija de la Maestranza, y el Ministerio de Cultura. Para colmo de problemas, la constructora del teatro de la Maestranza pide la liquidación de una deuda de 680 millones de pesetas más por obras.
Conflicto
El teatro Lope de Vega, municipal, es el único espacio que podría abrir sus puertas antes de final de año, concretamente en diciembre. El que así sea depende de que se resuelva un conflicto laboral surgido durante los meses de programación de la Expo.
"El director del Lope de Vega, José Luis Castro, prepara la programación de diciembre, pero si no, resuelven los problemas del pago de las horas extra que ha hecho el personal durante la Expo, habrá que compensarlos con días libres y no podremos abrir en diciembre", explica Vila. Sin embargo, no hay ninguna duda acerca de la continuidad del Lope de Vega, único espacio escénico del que ha dispuesto la ciudad durante muchos años.
El teatro Central, que durante la muestra ha ofrecido espectáculos de vanguardia y se ha situado a la cabeza de los cuatro espacios con una media del 79,21% de ocupación, pasará a depender del Centro Andaluz de Teatro (CAT) de la Junta de Andalucía.
La Sociedad Estatal Cartuja 93, que ha sustituido a Expo 92 en la gestión de las instalaciones de la isla, ha de hacer entrega del edificio al CAT. Roberto Quintana, director del CAT, no cree que la entrega sea antes de enero de 1993.
Por tanto, el Central tampoco dispone de una programación, aunque se basará en las producciones propias del CAT y en las de compañías andaluzas. Según Quintana, el Central necesitaría un presupuesto anual de unos 200 millones.
El caso del Auditorio de la Expo, un gigante escénico con 4.500 localidades, está aún más verde. Cartuja 93 ni siquiera ha respondido a las llamadas de este periódico. Vendido en su día como uno de los mayores espacios para conciertos al aire libre del mundo, se ha discutido su idoneidad para macroespectáculos de rock (el aforo es insuficiente) y para montajes convencionales (las compañías de ballet o las de teatro se pierden en su inmenso escenario).
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.