Cuatro países nórdicos se alían contra la Comisión Ballenera
Cuatro países balleneros del Atlántico Norte han celebrado la reunión fundacional de una organización que tiene el objetivo declarado de "controlar la caza y preservar los mamíferos marinos de pequeño tamaño". En realidad pretenden desmarcarse de la Comisión Ballenera Internacional (CBI) que prohíbe la caza comercial de cetáceos. Japón ha manifestado su apoyo a la iniciativa.Los representantes de Islandia y de Noruega, junto con las autonomías danesas de Groenlandia y las islas Feroe, reunidos hasta ayer en las Feroe, han establecido las bases de la Comisión de Mamíferos Marinos del Atlántico Norte (CMMAN), anunciada durante la última: reunión de la CBI, que se celebró en Glasgow el pasado mes de junio. Esta comisión se concentrará por ahora en las focas y ballenas pequeñas, de las que no se ocupa ningún otro organismo internacional, dijo ayer el recién elegido presidente de la CMMAN, el feroés Kjartan Hoydal.
El noruego Stein Owe aclaró que la comisión se crea por el fuerte descontento de los cuatro países sobre el funcionamiento de la CBI. Estos países creen que la población actual de rorcuales aliblancos en la zona, unos 86.000 ejemplares, es suficiente para permitir la caza "con fines científicos". Ninguno de los asistentes a la reunión se pronunció sobre la posible ampliación los cetáceos de mayor tamaño de las competencias de la CMMAN, que tendrá su sede en la ciudad noruega de Tronisoe. Algunos delegados no descartaron, sin embargo, que el nuevo organismo sea el principio de una división en el seno de la CBI, de la que se retiró Islandia pero no los otros tres países.
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