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Sendero Luminoso aterroriza a Lima en el segundo día de 'huelga general armada'

El lanzamiento de una bomba de fabricación casera contra la base aeronaval de Lima marcó el inicio del segundo día de huelga general armada de 48 horas, que la organización maoísta Sendero Luminoso trataba de imponer a la capital de Perú. A este atentado siguieron al menos otras cuatro explosiones que provocaron al menos un muerto, según la policía. Los tres ocupantes de un camión que se atrevió a desafiar las ordenanzas senderistas fueron asesinados, y el vehículo, quemado.

Seis vigilantes resultaron gravemente heridos al estallar un coche bomba con 400 kilos de explosivo junto al edificio de la compañía Sol Gas, en Lima.Igual que el miércoles, la población limeña tuvo dificultad en conseguir medios de transporte público. La mayoría de los propietarios de microbuses, que constituyen la mayor parte del transporte colectivo de la capital de la república, fueron intimidados por los senderistas y no salieron a trabajar.

A pesar de que esta violenta oleada de atentados ha logrado aterrorizar al país, los peruanos tratan de minimizar sus consecuencias y ayer mismo hubo una movilización cercana a la normal de vehículos particulares, cargados con gente que se dirigía a su trabajo. La circulación quedó, sin embargo, prácticamente interrumpida en las zonas de reconocida presencia senderista, como Canto Grande, en el distrito de San Juan de Lurigancho. Entretanto, el Gobierno salió parcialmente de la extraña pasividad que mantuvo durante los primeros ocho días de la más brutal ofensiva de la organización guerrillera contra Lima, en los 12 años de guerra interna que padece el país.

Treintena de detenciones

En la tarde del miércoles, efectivos militares y policiales salieron en número significativo a las calles de Lima en operaciones de control y registro de coches que se prolongaron hasta el inicio del toque de queda para los vehículos, a las diez de la noche. Una treintena de personas fueron detenidas y un coche bomba desactivado. El toque de queda para el transporte motorizado fue implantado en Lima hace cerca de, dos meses, después del atentado con un camión bomba, que destruyó la estación de televisión Frecuencia Dos. En las múltiples acciones de hostigamiento y represalias que llevaron a cabo grupos senderistas durante el miércoles, tres taxistas fueron asesinados, y uno de ellos fue quemado dentro de su coche, después de haber sido apaleado. Los seis niños heridos en el atentado contra el colegio Emilio Soyer se recuperan satisfactoriamente.Las provincias que rodean Lima también resultaron afectadas por la "huelga general armada". El transporte interprovincial fue virtualmente paralizado. Dos días antes del inicio del paro, los senderistas trataron de hacer explosionar un coche bomba en la terminal de Tepsa, una de las compañías más grandes de transporte interprovincial en Perú. La explosión fue débil, pero el efecto intimidatorio fue aparentemente conseguido.

Ayer, además del asesinato de los tres ocupantes de un camión que transportaba ganado, dos autobuses quedaron destruidos por los senderistas cuando intentaban desafiar sus consignas.

Entretanto, el presidente de hecho, Alberto Fujimori, pasó la mayor parte de estos dos días reunido o en contacto telefónico con sus jefes militares. A pesar de que todo el país esperaba el miércoles por la noche que Fujimori dirigiera un mensaje a la nación indicando las medidas adoptadas por su Gobierno para afrontar la nueva ofensiva senderista, éste no se produjo, aunque anoche no se descartaba que lo hiciera durante esta madrugada al término de la huelga armada senderista.

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