El Ayuntamiento obtendrá 3.300 millones de 20 aparcamientos

La política de transportes del equipo de Gobierno del Partido Popular se define cada día mejor. La jornada de hoy será muy clarificadora. A media mañana habrá una reunión en el Consorcio de Transportes en la que se comprobarán las verdaderas intenciones municipales sobre la deuda de 6.013 millones contraída con este organismo. El plazo para satisfacerla expiró. Horas más tarde, el Ayuntamiento aprobará la construcción de 20 nuevos aparcamientos para coches, de donde obtendrá unos 3.300 millones de beneficios.El visto bueno a los aparcamientos, 15 para residentes y cinco mixtos, se dará esta mañana en la comisión de Circulación, que estudiará los pliegos de condiciones. Estos proyectos significan la puesta en el mercado de 10.520 nuevas plazas. Los interesados, además de pagar a la constructora alrededor de 1,1 millones de pesetas, tendrán que entregar al Ayuntamiento un canón que, según las zonas, varía entre 100.000 (San Blas) y 650.000 pesetas (General Perón). El Ayuntamiento aprobó en mayo 12 aparcamientos, con 5.825 plazas, de donde ingresará otros 1.825 millones de beneficio.

El portavoz del PSOE en la comisión, Eugenio Morales, aplica un símil naturista para criticar las intención municipal de perforar la ciudad: "Se ve claramente que el coche, para el equipo de Gobierno, es una ubre que están permanentemente estrujando, y que utilizan los aparcamientos no para solucionar los problemas del tráfico, sino como elemento recaudatorio".

Deuda del consorcio

El presidente del Consorcio Regional de Transportes y consejero de la Comunidad, Julián Revenga, fijó el mes pasado, en el último consejo de administración, un plazo hasta el 20 de julio para que el Ayuntamiento pagase sus deudas. Esto no ha sucedido. Los responsables de la Comunidad en el consorcio desean que ocurra hoy. Revenga avisó entonces que si el municipio no pagaba se optaría por plantear un contencioso administrativo, pero ésta es una amenaza que tampoco convence demasiado. Supondría un proceso lento que enfrentaría aún más a las dos instituciones.

El concejal de Circulación, José Antonio García Alarilla, no ha contestado a ninguno de los requerimientos oficiales que se le han planteado desde el consorcio para conocer sus intenciones en este sentido. Ayer estuvo ilocalizable para este periódico.

El Ayuntamiento no reconoce la cuantía de la deuda que se le reclama, exactamente 6.013 millones de pesetas. Los responsables municipales admiten que durante 1991 no se aportaron 4.231 millones, pero no quieren saber nada de los 1.782 que se solicitan del ejercicio anterior. Esta última partida se obtiene de dividir, proporcionalmente, entre las administraciones, el exceso de inversión ejecutada aquel año sobre la inicialmente programada.