La CE no se compromete a dedicar el 0,7% del PIB como ayuda al desarrollo en el 2000

Los países ricos anunciarán a partir de hoy, inicio de la cumbre política que congrega a más de un centenar de jefes de Estado y de Gobierno, sus compromisos financieros para proteger el medio ambiente mundial. Ayer fue el último día de apresuradas negociaciones para alcanzar el acuerdo sobre los documentos a aprobar en la Cumbre de la Tierra. España es uno de los países que se opone a comprometer el 0,7% del PIB para la ayuda al desarrollo en el 2000, con lo que la Comunidad Europea apoyará la misma redacción suavizada de la Agenda 21 que EE UU.

Los puntos más conflictivos de la Agenda 21 -el plan de acción sobre medio ambiente para el siglo que viene- son la fijación de plazos o no para que los países ricos se comprometan a dedicar el 0,7% de su producto interior bruto (PIB) a la ayuda oficial al desarrollo, y el capítulo referido a la atmósfera, al que se oponen ,fuertemente los países productores de petróleo, ya que en él se aboga por un menor consumo de la, energía procedente de combustibles fósiles. También estaba ayer en litigio todavía la Declaración de Bosques, a pesar de las concesiones hechas por EE UU, Europa y Japón sobre la necesidad de convocar una conferencia internacional de desertificación, como pedían los países africanos. Esta recomendación ha quedado incorporada a la Agenda 21, así como la creación de un órgano de seguimiento de los acuerdos de Río, la Conferencia para el Desarrollo Sostenible.El texto sobre la dedicación del 0,7% del PIB a la ayuda al desarrollo tendrá finalmente una redacción muy suavizada, sin marcar plazos para cumplirlo. El jefe de la delegación comunitaria, Laurens Brinkhorst, citó ayer a España, Portugal y Grecia entre los países que se oponen a ratificar este compromiso antes del año 2000, lo que justificó por su reciente llegada al club de los países ricos o donantes. Sin embargo, José Antonio Yáñez, embajador de España ante la ONU, afirmó que son mayoría los países de la CE que se oponen.

Por su parte, José Borrell, ministro español de Obras Públicas y Transportes, dijo: "Hemos dejado claro que no nos podemos comprometer con el 0,7% porque somos uno de los países que ha accedido recientemente a la prosperidad, nuestra renta per cápita es todavía sólo del 75% de la media comunitaria". Borrell añadió que España dará prioridad a América Latina y el Magreb como receptores de esta ayuda al desarrollo. Como señaló el miércoles Maurice Strong, secretario general de la Cumbre de la Tierra, las cantidades de dinero que se citan en la Agenda 21 como necesarias para cumplir sus objetivos son meras estimaciones, pero se espera que los países ricos hagan anuncios sobre compromisos financieros que permitan al Sur iniciar la vía del desarrollo sostenible y que sirvan de contrapartida al rechazo del 0,7% del PIB.

Ayer se hicieron más fuertes los rumores sobre un inminente anuncio de Japón de dedicar 7.500 millones de dólares en los próximos tres a cinco años a la financiación de proyectos medioambientales, mientras la CE estaba a la espera de poder anunciar el acuerdo de sus 12 países miembros para crear un Fondo Verde que permitiría dedicar 3.000 millones de ecus (unos 400.000 millones de pesetas) a la protección del medio ambiente en el Tercer Mundo.

Bush, en Río

Antes de salir ayer de Washington con destino a Río, el presidente norteamericano, George Bush, insistió en que "si Estados Unidos tiene que ser el único país que se mantenga en contra del Tratado de Biodiversidad tal como está redactado, lo será". Bush dijo que acude a la Cumbre de la Tierra consciente de que va a ser tratado como el malo de la película, pero dispuesto a "defender los intereses de EE UU y del medio ambiente". El presidente norteamericano aseguró que "ninguna otra nación ha hecho más que Estados Unidos y más rápidamente para limpiar las aguas, el aire y proteger la tierra", informa Antonio Caño.

El hotel Sheraton, donde se hospedará el presidente norteamericano, era ayer una fortaleza rodeada por tanques. Bush tiene previsto hablar hoy durante siete minutos, el mismo tiempo concedido a los 118 líderes mundiales -64 jefes de Estado y 46 primeros ministros, además de 8 vicepresidentes incluyendo un príncipe heredero-que son esperados en Río, según los datos de la última lista oficial. La mesa donde se reunirán todos los altos mandatarios es de madera -algunos han dicho que madera tropical-, en forma de anillo. Tiene 77 metros de diámetro y en ella caben 135 comensales.

Un pequeño incidente se produjo ayer cerca de Riocentro, la sede de la Cumbre, cuando una treintena de ecologistas pretendían celebrar una conferencia de prensa. Los jóvenes fueron detenidos por la policía.