Almodóvar produce monstruos
Alex de la Iglesia rueda 'Acción mutante'
En España se ha hecho mucho cine terrorífico por diferentes causas, pero muy poco, prácticamente nada, de cine de terror, del género que los norteamericanos denominan gore. Lo mismo ha ocurrido con la ciencia-ficción. La razón principal se encuentra en los presupuestos, elevadísimos, que exigen las películas de vísceras y efectos especiales. Pero ahora una extraña y, como poco, alucinante película puede cambiar este panorama. Se trata de Acción mutante, ópera prima de Alex de la Iglesia y, además, la primera producción de la factoría Almodóvar que no es dirigida por el famoso cineasta manchego.
El presupuesto de Acción Mutante es elevado para el cine español: asciende a 350 millones de pesetas -de los que 100 son subvencionados por el Ministerio de Cultura-, entre otras razones, porque cuenta con la participación de artífices de efectos especiales en Aliens III y Delicatessen. Aunque no parece fácil la clasificación de la película, todo indica que podría estar a caballo entre Aliens y La parada de los monstruos (Freaks), obviamente, en versión hispana. Un grupo de minusválidos físicos se rebela contra el mundo en que viven, que sólo potencia a los guapos. Es el año 2012, y algunos, como les resulta complicado desplazarse en silla de ruedas, prefieren hacerlo con platillo volante; otros -encabezados por Antonio Resines- deciden formar una banda (que da el nombre a la película), secuestran a la hija de un industrial -Fernando Guillén- y, en una nave espacial, la llevan al ¡planeta Asturiax! Así de estrambótico discurre el argumento de Acción mutante, la película con que Almodóvar pone la primera piedra de un viejo sueño: convertir su productora El. Deseo en una factoría -tal y como Warhol intentó con la suya- que descubra y produzca a cineastas.
"No buscamos imitadores de Pedro", afirma Agustín Almodóvar, hermano del director y, además, quien realiza el papel de productor en sus películas. "Nos gustó mucho el guión de Acción mutante y nos atrajo participar en otra apuesta estética, absolutamente diferente a la que nos movemos en las películas de Pedro", reconoce, y, un paseo por el plató donde se está rodando la película desde hace tres semanas en Madrid, no deja lugar a dudas sobre la diferencia entre este filme y los últimos de Almodóvar: vendría a ser algo así como saltar del Tiffanys neoyorquino al Rastro madrileño o de Carmen Maura a Borís Karloff.
Alex de la Iglesia, de 26 años, natural de Bilbao y hasta ahora autor de cortos de culto como Mirindas asesinas, es el máximo responsable (coguionista, director): "Soy el, culpable de todo", dice, de Acción mutante. Lleva casi tres años dando vueltas a la película. "Hace dos, una amiga le hizo llegar a Almodóvar Mirindas asesinas y el esbozo de guión de Acción mutante. Le gustó, y me llamó", dice.
A la pregunta de si quiere hacer una versión hispana de las películas que hace la productora Troma (cine satírico-cutre) en EE UU o apuntarse a la moda juvenil por el gore y la ciencia-ficción, contesta Alex de la Iglesia: "Las películas que he visto de Troma me parecen malas, y el gore como género también me parece malo, aunque me divierte, y si Acción mutante sale bien, espero poder hacer en la siguiente una película de género de terror de verdad, porque ésta no lo es".
"Lo que ocurre", añade, "es que el género me atrae como apuesta estética: en España nunca se ha hecho una película así".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.