"Hay personas mejor capacitadas que yo para esta tarea", dice el jefe del Gobierno

"Hay unas cuantas personas capaces de hacer esta tarea como yo o mucho mejor que yo", afirma el presidente del Gobierno, Felipe González, en una entrevista que publica el semanario Tiempo. El jefe del Ejecutivo responde de esta manera a si dejaría el cargo en caso de que hubiera alguien capaz de sustituirle. Sin dar nombres, asegura que hay posibles relevos con "capacidad, empuje, conocimiento y muchas ganas". "El problema es que todavía personalizamos en exceso el sistema", añade. González afirma: "Me apasiona el proyecto, pero no me apasiona nada este puesto". Luego puntualiza: "Me apasiona la tarea pero no me gusta el poder". El presidente aborda también la salida de Alfonso Guerra del Gobierno: "Fue para mí un poco más traumática a nivel personal que a nivel político". También se refiere a su sucesor en la vicepresidencia, Narcís Serra, cuya tarea elogia.

Respecto a las dimisiones, señala que "un responsable político debe dimitir cuando tiene conciencia de que se ha equivocado gravemente o lo ha hecho mal". No debe hacerlo simplemente porque se sienta acosado o por razones demagógicas.

González se muestra preocupado por la cohesión de España: "Todavía esta unidad que respeta la diversidad no se ha tomado suficientemente en serio. Me gustaría recuperar para todos los españoles, dentro de su pluralidad, esa idea de que España es algo que nos identifica". Respecto al PSOE, considera necesario que tenga "una capacidad de renovación permanente". Asegura que todo Gobierno tiende a desplazarse hacia el centro por "un ejercicio de responsabilidad". No ve espacio para una alternativa de izquierda al PSOE.

"No necesito hacer populismo, ni quiero exhibirme con la gente para dar pruebas de que percibo la realidad del país", afirma. González, que defiende el plan de convergencia con Europa y rebate las razones sindicales para la huelga del 28 de mayo, pide que se reconozca "el notable aumento de bienestar que se ha producido en España". Considera que la sociedad es más justa que la de hace 40 años y que se han logrado los objetivos del sistema político en el que se apoya su Gobierno.

En este sentido, el presidente González considera que, a pesar de las deficiencias, se han cumplido los tres objetivos de la solidaridad socialdemócrata, especialmente en los campos de la educación, la sanidad y las pensiones. Finalmente, asegura que un político, puede esperar reconocimiento a su labor, pero no gratitud.