Vale, OK
De tarde en tarde, ustedes aceptan cartas de sus lectores que se quejan del mal uso de la lengua. Hace varios meses publicaron tres artículos de Marcial Suárez sobre la defensa del idioma, y acordándome de ellos quisiera hacer referencia a la invasión a que nos está sometiendo el señor Bush en estos asuntos, como si no le bastara hacerlo con los políticos y económicos.En las calles vemos a docenas de chavales jóvenes y no tan jóvenes luciendo camisetas con frases en inglés (muchos ni saben lo que significan esas palabras), y no he visto a ninguno luciendo alguna con motivos españoles; en una radio de FM, el personal de micrófono hace prácticas de pronunciación, anunciando los títulos musicales en inglés, sin molestarse en traducirlos para los que sólo hablan español.
En la televisión, las niñas y algunos viejos del deporte hablan de final four, match play, game, pole position o nos dan anuncios con la expresión don't worry. Hasta en la prensa he leído un anuncio de un camión presentado como the best truck of the year.
Los catalanes, con razón, polemizan sobre su derecho a usar su lengua de modo oficial y, sin embargo, en la plaza de las palomas de Barcelona vi un anuncio luminoso de una marca japonesa que decía: "The best sound in the world".
Por último, en los nuevos autobuses de Madrid, íntegramente fabricados en España, supongo, en vez de usar las cuatro letras del pare español han preferido usar las cuatro letras para decir stop.
Todo lo anterior me parece más curioso todavía, ya que España, de todos los países americanos o europeos que conozco, es el único que no se ha sometido al OK del señor Bush, imponiendo su vale con idénticos usos.-
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