Radio Futura recupera sus antiguas canciones con aire festivo

Dos años después de publicar su último disco con canciones inéditas -Veneno en la piel-, Radio Futura regresa con un trabajo que recupera antiguas canciones y las ofrece para el baile. Tierra para bailar, que anoche se presentó en Madrid, incorpora ritmos y tímbricas latinas y llena el silencio discográfico de un grupo que, según su cantante, Santiago Auserón, "se encuentra en un momento de estudio y de reflexión activa".

La puerta del antiguo cabaré elegido para la presentación de Tierra para bailar, reproducía fielmente la portada del disco y recordaba Jamaica: una cabaña de madera con el letrero Welcome to Negril. Aerodrome. Era la referencia a una de las pasiones del trío formado por los hermanos Luis y Santiago Auserón y Enrique Sierra: el reggae. Este carácter étnico marca la línea de Tierra para bailar, disco que recopila algunos de los grandes éxitos del grupo madrileño -El tonto Simón, Paseo con la negra flor, Semilla negra, Corazón de tiza...-, aunque con ritmos y tímbricas más latinas. Entre las ocho canciones del disco, dos novedades: El puente azul, una composición nueva, y Tierra, una versión del tema del brasileño Caetano Veloso."La historia de Tierra para bailar viene de 1987, cuando Jo Dworniak, nuestro productor, nos propuso un disco con remezclas", dice Santiago Auserón. "Hizo un análisis de los ritmos y nos decidimos. Descartamos canciones y añadimos otras, como Tierra y El puente azul". El disco, grabado, en Londres, ha costado un mes de trabajo previo, fundamentalmente a cargo de Dworniak, y otro con los tres músicos del grupo, que en los últimos años ha publicado dos discos recopilatorios y uno con temas originales. "Sabemos que esta segunda recopilación tiene cierto riesgo, pero vimos que las canciones subían con el nuevo tratamiento", continúa Santiago Auserón, el más hablador del grupo. "Los nuevos arreglos nos dejaban respirar, porque siempre hemos pedido cosas complejas y se nos ha suministrado la clave". Radio Futura se formó en 1979 y en los últimos años sus apariciones han sido muy esporádicas. "Hay que frenar los caballos", continúa Santiago Auserón, "porque paramos las giras en 1991 y no queremos grabar material de recurso. Necesitamos un periodo de estudio y no volveremos a la arena hasta que las ideas estén claras".

Durante este periodo de semiretiro, Santiago Auserón ha publicado Semilla del son -una recopilación de música cubana-; su hermano Luis intenta hacer lo propio con el rock brasileño -"Las discográficas piden unos derechos de reproducción tan altos que la publicación se complica", afirma-, y Enrique Sierra se dedica a perfeccionar su tratamiento de la música por ordenador -"Me estoy volviendo loco", dice- Es un periodo de transición que Santiago Auserón explica como "la necesidad de frenar las presiones del éxito y reflexionar activamente".