En constante movimiento

Paolo Fresu

Paolo Fresu (trompeta y fliscorno), Tino Tracanna (saxos tenor y soprano), Roberto Cipelli (piano), Attilio Zanchi (contrabajo) y Ettore Fioravanti (batería). Café Central. Madrid.

Suplemento por actuación: 900 y 1.000 pesetas. Hasta el 19 de enero.

Hace poco más de un año, Paolo Fresu visitó el Café Central acompañado por músicos absolutamente desconocidos para él. Aun así, maravilló su madurez.Ahora ha vuelto con su grupo habitual, el mismo con el que lleva actuando en público y grabando magníficos discos de forma estable desde 1984. En la sección rítmica están Attilio Zanchi, contrabajista versátil de sonido grueso y percusivo, y Ettore Fioravanti, batería que maneja bien las escobillas y elude el vocerío cuando coge las baquetas. A medio camino se encuentra Roberto Cipelli, pianista culto y refinado que sacrifica la faceta de solista ocasional en favor de la de pilar armónico constante. La otra voz principal la pone Tino Tracanna, saxofonista de fraseo sinuoso e imprevisible, situado en una cuerda próxima a la de Joe Lovano. Con Fresu, forman una verdadera sociedad, compenetrada y cooperativa, dentro de la cual, una vez superada la inevitable etapa de acomodación, alcanzan esos momentos de intensidad en el intercambio de ideas que sólo surgen tras largos años de colaboración.

El quintento interpreta espléndidamente un repertorio que alterna composiciones del propio Fresu con clásicos bien seleccionados. Cada pieza es un motivo para la búsqueda colectiva del matiz perdido pero, destacando por encima de todos, Fresu manda. Tanto en acústico como en electrónico, pasa de la caricia al pellizco en un instante; acelera y retarda en un suspiro: es un gran músico en constante movimiento.