Almodóvar confiesa su miedo al cine americano en el estreno neoyorquino de 'Tacones lejanos'
Jodie Foster, Glenn Close y Susan Sarandon quieren trabajar con director español
El cineasta español Pedro Almodóvar declaró el jueves en Nueva York que el cine americano le da "miedo". Y opina que la industria americana M cine no le dejaría hacer lo que a él más le gusta: trabajar a su aire. Durante el estreno comercial de Tacones lejanos en Nueva York, tres grandes actrices de Hollywood, Jodie Foster, Glenn Close y Susan Sarandon, coincidieron en señalar a EL PAÍS que estarían encantadas de trabajar para Almodóvar.
Dos semanas después del pase privado de Tacones lejanos en el Lincoln Center, la última película de Almodóvar se presentó el pasado jueves en Nueva York. A partir de hoy, el filme, en castellano con subtítulos en inglés, se estrenará en 150 salas de este país con el nombre High heels. Tacones lejanos competirá con una treintena de películas por el Óscar de la Academia a la mejor película de habla no inglesa.Almodóvar, que presidió y dirigió la ceremonia del estreno de Tacones lejanos, cree que sólo rodará en Estados Unidos "cuando encuentre una película que pueda ser narrada en inglés, pero financiada con dinero europeo".
"Mi carrera en Estados Unidos es muy alentadora e insólita comparada con la de otros directores no americanos", declaró Almodóvar, quien recuerda que en este mercado muy pocas películas, incluidas las francesas y las inglesas, tienen tanto éxito como sus trabajos. La prueba de que su cine ha calado en Estados Unidos es que muchos profesionales americanos está interesados en integrarle en sus proyectos. "Los de la revista Life me llaman como si viviera en Nueva York, creo que me he convertido en el chico que viene de fuera y que triunfa".
El cineasta español no quiso hablar de las ofertas que ha recibido para dirigir a grandes estrellas norteamericanas "por una cuestión de educación", pero es cierto que ha tenido la oportunidad de hacerlo en varias ocasiones.
"Una productora de Hollywood me acaba de ofrecer la posibilidad de rodar una película con una actriz que ha ganado un oscar, pero me lo estoy pensando". Almodóvar no quiso revelar el nombre de esa estrella, aunque unas horas después de sus declaraciones la protagonista de El silencio de los corderos, Jodie Foster, dejó entrever que es ella la actriz que está negociando la posibilidad de rodar una película con el director español y declaró que "Almodóvar piensa en mí y yo pienso en Almodóvar".
"Me gusta hacer películas en las que creo", dijo Almodóvar. "He aprendido cine de una forma visceral, sin dinero pero controlando todos los aspectos. Aquí eso es muy difícil. Mis películas están llenas de detalles del día a día"
Rodeado de admiradores, convertido en la estrella de la noche en pleno Manhattan, Almodóvar reconoció que su vida era como "un cuento de hadas, como un melodrama". Las palabras de Almodóvar quedaron interrumpidas por los aplausos del público que asistió al estreno de sus Tacones lejanos. Allí también estaban los protagonistas de la película, Marisa Paredes, Miguel. Bosé, Victoria Abril, Bibí Anderson y también Glenn Close -Atracción fatal- y Susan Sarandon -Thelma and Louise-. Para Close, lo mejor de la película fue Ia mezcla entre dolor y humor" y calificó Tacones lejanos como "humana e inesperada". La actriz comentó que estaría encantada de trabajar con Pedro. Lo mismo sucedió con Susan Sarandon, quien se hartó de comer palomitas durante la película. La actriz declaró que Tacones lejanos le había encantado y que consideraba a Almodóvar como un director "real, sentimental y brillante". Brooke Shields, que también asistió al estreno, dijo que el cineasta español sabe "mezclar la tragedia con la comedia de una forma magistral".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.