España ofrece 600 soldados y 60 observadores

El Gobierno español ha ofrecido al secretario general de la ONU, Javier Pérez de Cuéllar, el envío de un batallón ligero de infantería, integrado por 400 a 600 soldados, y de unos 60 observadores militares a Yugoslavia como contribución a la futura fuerza de paz de las Naciones Unidas. Pérez de Cuéllar, que participó ayer en Madrid en la presentación de un libro del Ministerio de Defensa sobre la presencia de militares españoles en misiones de la ONU, cifró entre 9.000 y 10.000 el volumen de cascos azules que serán enviados a Yugoslavia y en unos 200 millones de dólares (20.000 millones de pesetas) el coste de la puesta en marcha de la operación.El secretario general de la ONU estimó que en un plazo de 10 días podrá contar con un mandato del Consejo de Seguridad que le permita dirigirse a los países para pedirles su aportación a la fuerza de paz. Antes, subrayó, será preciso que los contendientes respeten el alto el fuego y que se delimiten las zonas de despliegue de los cascos azules. Estos actuarán en las "áreas de crisis", lo que da a entender que no irán a las fronteras administrativas anteriores al conflicto como sugiere Croacia, sino allí donde se producen los enfrentamientos como pretende Serbia.

La contribución española, anunciada por el ministro de Defensa, Narcis Serra, fue el eje central de las conversaciones que ha mantenido Pérez de Cuéllar con las autoridades de Madrid durante su visita de cuatro días a España, la última antes de que deje su cargo el año próximo.

Por otra parte, Pérez de Cuéllar justificó en parte la filtración a Marruecos de datos sobre el referéndum del Sáhara, sobre la que ha abierto una investigación, señalando que la ONU es "una coladera", y que eventualmente resulta más fácil al Polisario beneficiarse de posibles filtraciones, pues cuenta con mayores simpatías.