Santa Bárbara y Pratt & Whitney forman una sociedad para fabricar motores
La empresa nacional Santa Bárbara, filial del INI fabricante de armamento militar, y la compañía norteamericana Pratt & Whitney, fabricante de motores de aviación y subsidiaria del grupo industrial United Technologies Company (UTC), constituyeron ayer en Oviedo la compañía Aeronautical Maintenance Tooling (AMT), que se dedicará a la fabricación, en la factoría de armas de Trubia (Oviedo), propiedad de Santa Bárbara, de utillajes específicos para la fabricación y reparación de motores de aviación.Santa Bárbara y Pratt & Whitney negocian en este momento la creación de una segunda sociedad mixta, también en régimen de joint venture o riesgo compartido, para la fabricación en Asturias de componentes y piezas de motores. Esas negociaciones previsiblemente se culminarán en 1992.
Aeronautical Maintenance Tooling (AMT) será operativa con carácter inmediato y tendrá su sede en las instalaciones de la Fábrica de Armas de Trubia, una de las dos factorías de armamento con que Santa Bárbara cuenta en el municipio de Oviedo. La inversión inicial alcanza los 200 millones de pesetas, aportados al 50% por los dos socios. AMT fabricará utillaje con destino fundamentalmente a la exportación. Según Donald H. Lang, Pratt & Whitney prevé que en torno al año 2010 el 70% de sus ventas se produzcan fuera de Estados Unidos. "Por esta razón consideramos crítica nuestra expansión a nivel mundial", señaló.
Política de diversificación
Además de las participaciones de los dos socios en el capital de la nueva compañía, Pratt & Whitney aporta a la nueva sociedad la tecnología y la gestión de mercados para sus producciones, en tanto que Santa Bárbara contribuye con las instalaciones de su fábrica de Trubia y el personal de este centro. Con ello, Santa Bárbara pretende garantizar carga de trabajo a esta fábrica, al igual que ha hecho en otros centros de fabricación de su propiedad, así como proseguir con la política de diversificación iniciada por esta empresa estatal con la incorporación de líneas de producción para usos civiles.AMT, cuya constitución se firmó ayer ante el presidente del Gobierno de Asturias, Juan Luis Rodríguez-Vigil, pretende facturar 400 millones de pesetas en 1992, y en torno a 1.000 millones al término de la presente década. Dará ocupación a un centenar de trabajadores, todos ellos procedentes de las dos fábricas de armas asturianas.
La empresa Santa Bárbara continúa negociando al mismo tiempo con la británica Rolls Royce la posibilidad de fabricar conjuntamente motores de aviación en Asturias. Recientemente se han firmado varios contratos de suministro de componentes.
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