El último recurso
La OTAN reducirá el uso del arma nuclear a "un último recurso", muy remoto en las actuales circunstancias, según el nuevo concepto estratégico que aprobarán los 16 jefes de Estado y de Gobierno aliados en la cumbre de Roma. Sólo Francia se separa de esta doctrina. La amenaza del enemigo tradicional, la URSS, se ve sustituida por las "inestabilidades" que subsisten para Europa. Aunque representan un riesgo de "menor envergadura", plantean el problema de que son "multidireccionales" y obligan a una defensa colectiva más flexible, pero reforzada en los flancos de la Alianza Atlántica.La identidad europea de seguridad y defensa, uno de los aspectos decisivos de la unión política de la CE, tiene un valor reconocido dentro de la nueva estrategia de la OTAN. Sin embargo, la redacción quedará abierta hasta la cumbre de los Doce en Maastricht. El presidente George Bush se reunirá con el primer ministro holandés, Ruud Lubbers, y con el presidente de la Comisión Europea, Jacques Delors, el sábado en La Haya, para informarles de los acuerdos. "La posición estadounidense", según fuentes diplomáticas, "es muy flexible, siempre que se garantice, que no se debilitará la Alianza".
La duodécima versión
El nuevo concepto estratégico de la OTAN es un texto voluminoso, que en la duodécima versión de su borrador ocupa más de 30 páginas. El consenso, según fuentes de la Alianza, "es total en un 90%, y sólo algunos párrafos son contestados por Francia".
Por primera vez en la historia de la organización, la estrategia militar figurará en un documento político aprobado en una cumbre. La "respuesta flexible" puesta en pie en 1967 fue adoptada por el Comité Militar un año después de la salida de Francia de la estructura militar. La nueva estrategia es el resultado del mandato de la cumbre de Londres, el 6 de julio de 1990, para construir una OTAN adaptada a los cambios en el Este.
Los aliados renovarán su compromiso en la defensa del territorio , como una garantía contra "la renacionalización de las políticas de defensa y el presunto de rivalidades europeas", afirman fuentes de la Alianza. La nueva estructura de mandos y fuerzas se adaptará a la reducción de efectivos y armamentos, aunque la OTAN dispondrá de fuerzas de reacción rápida. El concepto de "defensa avanzada" (dispositivos reforzados frente al enemigo para, en caso de ataque, llevar la guerra a su territorio) se abandonará donde es apropiado, es decir, en Centroeuropa. Se mantendrá en los flancos: Noruega, Turquía y el Sur, para dar una respuesta rápida a los posibles riesgos.
