González pide una solución pacífica para reponer a Aristide como presidente de Haití

El presidente del Gobierno, Felipe González, pidió ayer una solución pacífica al conflicto que vive Haití y que permita reponer al presidente derrocado Jean Bertrand Aristide. Aristide considera que en un plazo medio estará de nuevo gobernando su país, según declaró en el aeropuerto de Madrid-Barajas. El presidente derrocado llegó a Madrid a las 11.30 procedente de París, en tránsito de dos horas de su viaje a Caracas, y mantuvo una reunión en el palacio de la Moncloa con el presidente del Gobierno español, Felipe González.

En el curso de la reunión González puso de manifiesto que no es partidario de una intervención armada en Haití para reponer al presidente destituido y defendió una solución concertada por las Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos (OEA). Aristide, por su parte, pidió a Felipe González su solidaridad para que el previsto embargo contra los militares que ocupan ahora en poder en Haití sea un éxito.

Aristide señaló que "tenemos que ver entre todos lo que se puede hacer para imponer el embargo y hacerlo respetar íntegramente, porque es lo que puede ayudarnos a esa causa que se llama democracia". "Creo", añadió, "que si el embargo es respetado por la comunidad internacional será suficiente para que yo pueda volver a la presidencia en un plazo medio, sin embargo, es una lástima que aún no se cumpla ese embargo".

Aristide señaló que "no se trata para mí de hacer algo para volver al poder. De lo que se trata es, como ciudadano del mundo, de defender más allá de un hombre, más allá de un poder, más allá del pueblo haitano, la democracia que pasa ahora por nuestro retorno". Aristide descartó la posibilidad de que haya un proceso electoral en Haití, tal como han anunciado los militares en el poder.