Christo planta 3.100 sombrillas en Japón y EE UU
La última megalomanía del artista búlgaro cuesta 2.600 millones de pesetas
El artista búlgaro Christo Javacheff ha comenzado el pasado miércoles en la aldea japonesa de Hitachi su última megalomanía: un espectáculo transoceánico en el que pretende desplegar 3.100 sombrillas gigantes en campos de Japón y Estados Unidos. El artista, especializado en obras transitorias de arte -años atrás se atrevió a envolver en tejidos el Pont Neuf de París- colocará en una semana un total 1.340 sombrillas azules a lo largo de 12 kilómetros de la aldea de Hitachi, provincia de Ibaraki, y otras 1.760 sombrillas, éstas de color amarillo, en la localidad californiana de Tejón.
Las sombrillas son de alumnio, enormes, y pesan mucho. Tienen seis metros de altura, 8,7 metros de diámetro y 200 kilos de peso.Para comenzar a instalarlas, Christo tuvo que recurrir el miércoles a la ayuda de agricultores, funcionarios del Ayuntamiento de Hitachi e incluso voluntarios, que, todos juntos, mantuvieron una tenaz lucha con la lluvia, que desde comienzos del mes de septiembre no ha cesado de caer en todo el archipiélago.
Dos realidades
"Perdonen ustedes, no siento ningún placer especial si abro las sombrillas en medio de este miserable tiempo", manifestó el artista cuando se le impulsó a desplegar sus obras octogonales, recordando que, al fin y al cabo, estas sombrillas podían ser también paraguas bajo los que guarecerse del chaparrón.Christo Javacheff, de 56 años y que actualmente vive en Estados Unidos, dijo que con este espectáculo intenta contrastar dos realidades diferentes del mundo.
"Es como una sinfonía en dos partes", explicó ante 300 invitados, "en la que una es rápida y la otra lenta". El color azul de las sombrillas japonesas expresa, según asegura Christo, la ajetreada vida agrícola del archipiélago, mientras que las sombrillas amarillas, que comenzaron a extenderse ayer en Estados Unidos, mostrarán la sequedad de los ranchos de aquel país.
El artista afirmó que la idea de este proyecto nació en 1984 y que los 26 millones de dólares -alrededor de 2.600 millones de pesetas- que cuesta montar este espectáculo transitorio han sido costeados por él mismo, con la venta de borradores, collages y maquetas.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
