La CE retrasa la supresión de beneficios fiscales a empresas en el País Vasco

El Gobierno Vasco ha logrado de la CE un período suplementario de reflexión para evitar la supresión de los beneficios fiscales a las empresas. La Comisión Europea considera que esas bonificaciones son ayudas públicas encubiertas y significan una discriminación contra el principio de libre establecimiento.

Según el consejero de Hacienda y Finanzas del Gobierno vasco, José Luis Larrea, "se abre ahora un compás de espera para evitar un decisión no suficientemente meditada". La posición del Gobierno vasco fue defendida por Larrea en las entrevistas que mantuvo anteayer en Bruselas con los comisarlos Leon Brittan, responsable de la defensa de la competencia, y Christianne Scrivener, encargada de la política fiscal.También mantuvo contactos con el comisario Abel Matutes y el embajador español ante la CE, Camilo Barcia.

La Comisión inició un procedimiento de infracción contra las deducciones por inversión en activos aprobadas en el País vasco en 1988. Las ventajas para las empresas que paguen sus impuestos a la Hacienda vasca van del 20% al 45% del total de la inversión. Esas deducciones pueden aplicarse a la tarifa del impuesto de sociedades a lo largo de cinco años.

La tesis del Ejecutivo vasco, apoyada por el Gobierno central en las alegaciones presentadas a Bruselas, es que no se trata de ayudas de Estado prohibidas, sino de un problema derivado de las competencias autonómicas en materia fiscal.

El consejero José Luis Larrea manifestó estar abierto a "soluciones o adaptaciones de la normativa para evitar la discriminación". En pequeña escala, "este conflcito es un anticipo de lo que puede suceder con los Doce tras la desaparición de fronteras en el mercado único de 1993", añadió.

La Comisión Europea está dispuesta a revisar algunos considerandos del procedimiento de infracción, pero exigirá el fin de una desigualdad de trato a las empresas en base a si pagan sus impuestos a la hacienda autonómica o a la hacienda del Estado.

Por otra parte, el consejero de Hacienda, recordó a los periodistas la exigencia de contar con un "ente público financiero vasco", un banco de depósitos para gestionar los coeficientes técnicos de cajas y cooperativas de ahorro vascas que ahora están en manos del Banco de España. Para Larrea, ésta es una "cuestión de fuero, por las competencias en la materia que da el Estatuto, y de huevo, para beneficiarse de los intereses y articular una financiación intereseante para el país".