Imágenes de Venus muestran por primera vez un planeta en el que se producen terremotos
AGENCIAS Imágenes tomadas con ocho meses de intervalo de la misma zona de la superficie de Venus muestran que se ha producido un gigantesco corrimiento de tierras, causado por un terremoto (más propiamente venusmoto). Estas escenas, tomadas por la sonda Magallanes de la agencia espacial de Estados Unidos, constituyen la primera prueba de actividad geológica detectada en un planeta, aparte de la Tierra. Con anterioridad las imágenes habían mostrado formaciones espectaculares pero ningún cambio.
El descubrimiento, hecho en la noche del jueves, constituye la primera evidencia directa de un cambio en la superficie de Venus, desde que la Magallanes, dotada de radar para penetrar la espesa capa de nubes que cubre el planeta, comenzó, en 1990, el envío de imágenes para trazar un detallado mapa de su superficie.Derrumbamiento gigantesco
Stephen Saunders, del laboratorio de Propulsión de la NASA, en Pasadena (California), dijo que las imágenes en rayos X tomadas por el radar de la sonda espacial el pasado 23 de agosto muestran un derrumbamiento de terreno de unos dos kilómetros de ancho por ocho de largo que no aparece en las de noviembre cuando la Magallanes pasó sobre la misma zona.
Saunders explicó que la energía necesaria para causar ese "suceso catrastófico" fue, al menos, la equivalente a un terremoto de 5,0 puntos en la escala sismológica de Richter. Este científico dijo que un venusmoto era la única explicación para que ocurra una avalancha de terreno de tal magnitud.
El fenómeno tuvo lugar en la región Gran Ecuatorial de Venus, que también es conocida como región de Afrodita.
El descubrimiento del jueves corrió a cargo del profesor Jeffrey Paul, cuando comparó las imágenes de radar de la región tomadas hace ocho meses, en el primer mapa circular de Venus enviado por la Magallanes, con las correspondientes a la misma región en el segundo cielo enviadas la semana pasada. "Cuando hice la comparación no pude menos que dar un salto de alegría", declaró Plaut.
Un directivo de la NASA, Wesley Huntress, dijo que se trata de "un gran descubrimiento" y que uno de los principales objetivos de la misión Magallanes es determinar si Venus es un planeta todavía vivo. "Ahora lo hemos visto. Venus es un planeta geológicamente activo, tanto como lo es la Tierra", manifestó Huntress con una no disimulada emoción.
La sonda, lanzada en 1989, proporciona imágenes estereoscópicas de la superficie de forma que al reconstruirlas se puede observar en tres dimensiones.
Puntos calientes
La superficie terrestre se ha formado y se forma con el movimiento constante de las placas tectónicas. Un terremoto ocurre cuando dos gigantescas placas chocan entre sí. Los puntos donde tales plataformas terrestres se encuentran reciben el nombre de fallas, siendo una de las más famosas, la de San Andrés, en California, no lejos de la localidad de Pasadena, desde donde se sigue la misión de la Magallanes.
Sin embargo, en Venus no se han detectado fallas y la acitividad volcánica procede presumiblemente de zonas calientes en el interior del planeta cuya energía llega a la superficie. También se barajan otras causas para fenómenos como el detectado, señaló Plaut. La erosión es una de ellas, ya que la superficie de Venus es tan caliente que en ella, se pueden fundir metales.
Antes del envío de la sonda Magallanes, Venus era conocido como "el planeta misterioso" porque una capa permanente de grandes nubes oculta su superficie a los telescopios terrestres y otros instrumentos ópticos.
En ninguno de los otros planetas del sistema solar se han podido apreciar movimientos de terreno que denuncien una actividad geológica, dijeron los científicos.
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