La nueva ruta fue descartada por su mayor impacto medioambiental

El trazado propuesto ahora por la Diputación Foral de Guipúzcoa ya fue estudiado por esta institución y descartado por tres razones. La principal era un impacto medioambiental superior al de Leizarán. Además, planteaba problemas técnicos de más envergadura y su construcción resultaba un poco más cara.De las 22 hipótesis de trabajo iniciales para la autovía quedaron seleccionadas dos. El trazado A 4, rescatado ahora, y el A 2, por el valle del Leizarán.

Los valles de Berástegi y Leizarán están separados por una cadena montañosa. En la alternativa A 4 la carretera penetra en Guipúzcoa por la ladera del valle de Berástegi y seis kilómetros después, en el alto de Belabieta, pasa al valle de Leizarán por un túnel de 900 metros y lo recorre durante cinco kilómetros aproximadamente.

Tras un definitivo análisis en profundidad, este trazado fue descartado por los técnicos en beneficio del otro finalista. El estudio de impacto previo puso de relieve un coste medioambiental superior a la solución del Leizarán, al afectar un valle como el de Berástegi, de alto valor paisajístico.