La Guardia Civil libera el 'Baltica' y detiene a cinco miembros de Greenpeace

Miembros de los grupos especiales de la Guardia Civil liberaron ayer al carguero Baltica, inmovilizado por Greenpeace desde el lunes, y detuvieron a cinco miembros de esta organización ecologista. Durante la operación un policía vestido de submarinista rajó con un cuchillo dos Zodiac de Greenpeace, según diversos testigos presenciales. La carga del Baltica, 1.700 toneladas de polvo de acería contaminadas con dioxinas, permanecerá inmovilizada hasta que Medio Ambiente del Gobierno vasco confirme que el cargamento se ajusta a la normativa medioambiental.

El juzgado de instrucción número 4 de Barakaldo había ordenado previamente al Gobierno Civil que procediera a la liberación del buque Baltica. El juez afirmaba en el mandamiento judicial que se había cometido un "delito de coacciones y desórdenes públicos" al inmovilizar el carguero.Tras conocer la orden de desalojo dictada por el juez, Juan López de Uralde, coordinador de la campaña de Greenpeace en el Cantábrico, señaló por radio a este periódico: "Vamos a intentar por todos los medios posibles, repito, por todos, que ese barco cargado con elementos contaminantes no entre en el puerto de Bilbao". Esta postura fue ratificada tras la reunión de urgencia mantenida entre el capitán y los miembros de la tripulación a las cinco de la tarde. Tres horas más después el Baltica atracaba en el puerto de Bilbao.

La operación policial se inició poco antes de la siete de la tarde. En ella intervinieron cerca de cincuenta efectivos de los cuerpos especiales de la Guardia Civil a bordo de una fragata de la Armada española y de dos zodiac. Seis policías se acercaron en las dos zodiac para retirar el cepo que impedía levar anclas al carguero. En esos momentos, dos lanchas de Greenpeace intentaron impedir la labor policial. Un submarinista de la Guardia Civil le advirtió entonces: "Cómo os acerqueís, os rajo las zodiac". Los forcejeos entre ambos grupos se sucedieron. El policía sacó un cuchillo de unos treinta centímetros y rajó las dos lanchas neumáticas. Los seis ecologistas que se encontraban en su interior fueron detenidos y trasladados al cuartel de la Guardia Civil en Bilbao.

Inmovilización

El viceconsejero de Medio Ambiente del Gobierno vasco, Xabier Garmendia, afirmó que este incidente "se podía haber evitado" si las autoridades españolas "no se hubieran escondido debajo de las piedras".El Gobierno vasco se ha comprometido a inmovilizar la carga del Baltica para realizar un contranálisis y disipar cualquier duda que pudiera existir sobre el contenido real de los residuos. En caso de que la carga contaminante de los polvos de acería exceda a lo establecido en la normativa vigente "el Ejecutivo autónomo se compromete a devolver los residuos contaminados a su lugar de origen".