Mil millones se recaudaron en San Isidro
En 20 corridas se puso el cartel de "no hay billetes" y hubo lleno en las seis restantes
La recaudación total de la recientemente acabada feria ha rondado los 1.000 millones de pesetas. Esta cifra se obtiene al sumar los más de 39 millones de pesetas de cada una de las 21 corridas de toros, los casi 60 por las tres novilladas, los 60 por los dos espectáculos de rejoneo y los 30 que pagó TVE a la empresa por la retransmisión de tres corridas. Para llegar a esta recaudación era necesario que la plaza se llenase todas las tardes, como así ocurrió.
El cartel de "no hay billetes" se puso en 20 de las 26 tardes pero en las otras seis, los días 10, 13, 21 y 30 de mayo, y 1 y 3 de junio, quedaron escasísimas localidades sin vender, y de las baratas: tendidos altos, grada y andanadas de sol. Los revendedores no oficia les ofrecían sus boletos libremente todos los días en los alrededores de la plaza, pese a la teórica vigilancia policial. La expectación máxima de los días en que estaba anunciado Espartaco (15 y 22 de mayo) y los de las reapariciones de Niño de la Capea y Paco Ojeda (17 y 27 de mayo, respectivamente) hizo que las entradas se cotizasen en la reventa hasta 10 veces por encima de su valor en taquilla.
Las casetas de la reventa autorizada del 20%, frente a la puerta grande del coso, estuvieron cerradas casi siempre. Las escasas veces en que estaban abiertas no tenían entradas, aunque junto a las casetas solían situarse revendedores ilegales con entradas que ofrecían con un recargo mucho mayor. La diferencia de criterios entre los cinco presidentes de los festejos se puso de manifiesto a la hora de devolver al corral los toros protestados por inválidos. En total se devolvieron 23 toros a lo largo de la feria, lo que permitió el lucimiento del mayoral de la plaza, Florencio Fernández, Flórito.
Toros devueltos al corral
Destacó Luis Espada, que, además de devolver prácticamente la mitad de estos toros (11), sacó el pañuelo verde una tarde en cuatro ocasiones y otra en tres.
A mucha distancia queda ron el resto de sus compañeros: Marcelino Moronta y José Luis Lamarca devolvieron cuatro toros, y Francisco Valderas y Amado Jorge, dos. Las corridas en las que hubo más devoluciones fueron las favoritas de las figuras: Galache, con cuatro toros devueltos; Cebada Gago, tres, y Concha Navarro y Bohórquez, dos cada una.
También las divisas de este corte comercial fueron las que más problemas ofrecieron y las que más toros rechazaron los veterinarios en sus reconocimientos. En la mayor parte de las ocasiones enviaron nuevos toros intentando que todos los lidiados fuesen del mismo hierro, lo que se consiguió pocas tardes. Las dos únicas divisas que fueron rechazadas íntegramente y hubo que sustituir la totalidad de la corrida fueron la de Aldenanueva y la novillada de María Auxilio Holgado. El festejo en el que se iban a lidiar estos novillos, en el que estaba anunciado Manuel Caballero -que encabeza el escalafón de su categoría-, fue el más problemático, pues los veterinarios hubieron de reconocer 19 novillos para poder aprobar los seis que finalmente se lidiaron, y que pertenecían a la divisa del torero Palomo Linares.
Babelia
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