"Cuba no va a perder su dignidad"

La última vez que Silvio Rodríguez cantó en España, su presencia coincidió con el fusilamiento en Cuba de cuatro militares condenados por narcotráfico. Era el 13 de julio de 1989. Quizá por esto, la primera impresión que da Silvio Rodríguez dos años después y pocas horas antes de comenzar una nueva gira por España, es la de estar a la defensiva, esperando siempre la pregunta ritual, como él la llama: la que se refiere a la situación actual de Cuba."Cómo pasa el tiempo", recuerda el músico, nacido el 29 de noviembre de 1946 en San Antonio de los Baños, un pueblecito cercano a La Habana. "Durante estos dos años me he movido poco. Cada vez tiendo a moverme menos. Entre las cosas que me vienen a la mente está el viaje del año pasado a Chile, un retorno después de 18 años de ausencia. Estaba en la famosa lista negra. Hicimos un concierto en el Estadio Nacional y grabamos un disco en directo. No fue producido con la mejor tecnología, pero nos esforzamos durante casi dos meses para sacar algo aceptable".

Desde la publicación de Oh melancolía, en 1989, Silvio Rodríguez no ha editado sus canciones inéditas en España; nada nuevo del autor de composiciones como Playa Girón, Sueño con serpientes, Te doy una canción o Rabo de nube, algunas de las cuales han aparecido en una recopilación que el músico David Byrne acaba de publicar sobre el cantante cubano. Canciones urgentes. Los grandes éxitos de Silvio Rodríguez es el título de este disco que recupera diez de sus temas más característicos.

"Yo no conocía a David", dice Silvio Rodríguez. "Había escuchado alguna vez a Talking Heads, no demasiado porque lamentablemente no estoy muy al día en cuanto a la música pop. Fue una sorpresa. Viajó a La Habana, estuvo más de un mes y hablamos del asunto. La producción se hizo con muchas atenciones y es muy interesante para mí porque puedo llegar a un público más amplio en los Estados Unidos. La selección la hizo él. Yo le di un par de opiniones, sin imponerle criterios, y él muy solidariamente las tomó en cuenta".

Nuevas canciones

La gira de Silvio Rodríguez por España comienza hoy en La Orotava (Tenerife), para continuar en Fuentevaqueros (día 5), Málaga (día 7), Mérida (día 8), Portugalete (día 14), San Sebastián (día 15), Madrid (días 18 y 19), Benicasim (día 22) y Barcelona (día 29). "El material que presentaremos", dice, "es casi todo inédito. Canciones nuevas, timbres nuevos, músicos nuevos. Lo único que no es nuevo soy yo, lamentablemente. En estas canciones hay de todo. Temática de pareja, como siempre, y cosas que miran específicamente a Cuba, como siempre la he mirado en mis canciones: de una manera comprometidamente crítica". Terminada la gira, Silvio Rodríguez viajará al sur de Francia para grabar los nuevos temas con el grupo Diákara, el mismo que le acompaña en su gira española.Cuando habla de la música cubana, Silvio Rodríguez pone en marcha su locuacidad por primera vez. "Para analizar la música cubana actualmente", dice, "hay que partir de una situación: a nosotros nos ha pasado un poco lo que les pasa a los capitalistas cuando tienen superproducción. Lo que ocurre es que aquí las papas no se pueden botar al mar, porque las papas son músicos y los músicos no son papas. Cuba ha creado ya, a través de las escuelas de arte, varias generaciones de músicos de gran cantidad y calidad, y por ser un país pobre y en dificultades no tiene una infraestructura adecuada para desarrollar esa potencialidad. Ese es nuestro drama, aunque, por otra parte, es una felicidad que se le haya podido dar una oportunidad a tanta gente. Pero no pueden producir correctamente porque no tenemos infraestructura ni en grabación, ni en técnica, ni en teatros, ni en nada. Tenemos una cantidad de músicos extraordinarios, pero ahora ¿qué hacemos con ellos si no hay instrumentos? Es una contradicción, aunque pienso que es mejor así a que la gente no haya tenido oportunidades. Nunca ha habido tantos músicos cubanos girando por el mundo. Yo pienso que no podemos detenernos, y que debemos aprovechar todas las posibilidades".

Ritual

Y Silvio Rodriguez se queda como a la expectativa, esperando la pregunta temida. "De domingo a domingo te vengo a ver. Vamos al ritual", dice entre resignado y sonriente, antes de terminar, tajantemente y de corrido: "Se ha derrumbado el campo socialista, que era nuestra retaguardia económica. Cada vez están en peores condiciones, por lo que cada vez les es más difícil cumplir con los acuerdos que tienen con nosotros. Al no tener ese tipo de protección, entre comillas, los que se atrevían un poco a estar más cerca de nosotros se han mosqueado más todavía. O sea que, en cierto sentido, nos hemos quedado un poco más solos, cosa que es mala, por una parte, porque quedarse solo no es grato, pero que tiene su parte buena, a mi modo de ver. Por primera vez nos estamos enfrentando a nosotros mismos, a nuestros problemas, a nuestras propias deficiencias. Estamos tomando dimensión de esto, y pienso que estamos adoptando medidas para hacernos mejores, dentro de las dificultades. A Cuba se le plantea una cosa muy clara: o se arrodilla y le pide perdón gimoteando a los americanos, o mantiene su dignidad. Cuba no va a perder su dignidad, y ya soy uno de los que no va a permitir que Cuba pierda su dignidad. ¿Te basta con esta respuesta?".