Un nuevo ciclón se acerca a las costas del devastado Bangledesh

Un nuevo ciclón se dirigía ayer hacia las costas de Bangladesh, en momentos en que el país buscaba salir de la catastrófica situación creada por los ciclones de la semana pasada. "Hemos avisado a la gente que permaneciera en estado de alerta", afirmaron fuentes oficiales en Chittagong, quienes señalaron que el ciclón "puede o no" golpear al país. [El presidente norteamericano, George Bush, anunció ayer el envío a Bangladesh una fuerza anfibia, integrada por miles de marines y decenas de helicópteros, para que colabore en las tareas de socorro, informa Reuter].La lluvia empeora por momentos la calamitosa situación. Otras 112 personas perdieron la vida ayer al desbordarse varios ríos en Sylhet, en el noreste del país. Esta zona se encuentra en estado de máxima alerta desde la tarde del viernes, en que las lluvias caídas en los Estados indios vecinos de Tripura y Assam hizo aumentar peligrosamente el caudal de numerosos ríos que vienen a desembocar al enorme delta que es este país. La India y Bangladesh comparten las aguas de 54 ríos.

Extensas zonas del valle de Sylhet han quedado inundadas y 50.000 personas han tenido que ser evacuadas a una veintena de campamentos establecidos para los afectados, a los que poca ayuda puede llegar, ya que los equipos de salvamento no dan abasto para socorrer a los millones de damnificados por el ciclón y los tornados que han convertido el país en una inmensa tumba.

"Maldita nuestra suerte. De qué nos sirve tener la tierra más fértil del mundo si cada dos por tres la arrasan las inclemencias meteorológicas", se lamentaba un periodista bangladeshí mientras esperábamos en vano que pasara la tormenta que impedía despegar al helicóptero militar en el que íbamos a desplazarnos a una de las islas azotadas por el ciclón, que se cobró el 29 de abril pasado al menos 150.000 vidas.

Las carreteras y las comunicaciones con el noreste de Bangladesh se encuentran cortadas desde ayer. Este aislamiento viene a sumarse a los graves problemas de telecomunicaciones, debido a que el ciclón dañó la única central terrestre que tiene el país. Hasta el momento han sido restablecidas sólo cinco líneas telefónicas internacionales desde Dhaka.