Rupert Everett

"No tengo remordimientos por vivir en París porque la era Thatcher, que aún continúa aunque ella no esté, hundió el cine y la cultura británica", afirmó ayer en Madrid Rupert Everett, uno de los guapos y más conocidos rostros jóvenes del cine inglés de los últimos años "Además añade el galán especializado en papeles ambiguos, me encanta ser un extranjero en la ciudad donde vivo".Everett ha venido a España para apoyar el estreno de la película El placer de los extraños, que dirigida por Paul Schrader -y con guión de Harold Pinter, basado en la novela homónima de lan McEwan- cuenta el encuentro en Venecia de una pareja en crisis -Rupert Everett y Natasha Richardson- con otra -Chistopher Walken y Helen Mirren- que es sadomaquista. Para unos, el filme es pretencioso, pedante y moroso, mientras que otros le dan el calificativo de cine "de calidad" y buscan referencias con Muerte en Venecia, de Visconti.

"Las reacciones del público con la película han sido muy extrañas", dice. "Por ejemplo, en Francia no gustó nada, mientras que en EE UU y Gran Bretaña sí. Creo que el guión es muy pintoresco y teatral, y muy dificil de traducir a otros idiomas. Y, para defenderla, define El placer de los extraños como "una versión moderna del cuento de Hansel y Gretel luchando contra el bien y el mal".

Rupert Everett tiene 31 años de edad, una figura que levanta suspiros tanto en el público femenino como en el masculino y, según afirma, "mucha constancia". Se empeño en ser actor deteatro y, aunque fue expulsado de la Central School of Speech and Drama de Londres, lo acabó consiguiendo por la vía de la práctica haciendo teatro en Escocia. La fama le llegó más tarde, gracias al filme Another country, en los años ochenta. Bailar con un extraño y Crónica de una muerte anunciada son otros títulos en los que ha intervenido con desigual fortuna.

"No creo que sea necesario pasar por una escuela para conseguir formación teatral", afirma, "pero el teatro sí es fundamental para mí". Y anuncia que va a interpretar en teatro Hamlet dirigido por Tony Richardson y en compañía de Vanessa Redgrave: "En España lo representaremos en mayo de l992".

El 92 parece ser muy importante para Everett. "Ahora vivo en Francia para poder integrarme en el cine europeo y, sobre todo, cuando llegue 1992 y la unión europea. El problema de hacer películas en Gran Bretaña es que es muy difícil lograr dinero para financiarlas y, además, como Gran Bretaña. vive aislada, no está muy unida al cine europeo".