La CE propone un programa marco de apoyo a la electrónica europea

La industria informática y electrónica europea recibirá ayudas para hacer frente a la competencia norteamericana y japonesa. Los ministros de Industria de la Comunidad Europea apoyaron ayer en Luxemburgo la propuesta de la Comisión de un programa de apoyo a la investigación tecnológica que permita corregir el déficit electrónico de la Comunidad Europea, que se eleva a un total de cuatro billones de pesetas al año.El plan comunitario va dirigido a potenciar los acuerdos de cooperación entre las grandes compañías europeas (ThomsomBull, Philips, Olivetti y Siemens), aunque España y Portugal lograron incluir entre los objetivos a las pequeñas y medianas empresas competitivas. El objetivo de la CE es la concentración empresarial para obtener una dimensión que permita a las compañías competir con las grandes multinacionales japonesas.

En los últimos años, Europa ha perdido cuota de mercado tanto en informática (sector en el que un 60% de la producción europea está controlada por multinacionales norteamericanas), como en semiconductores o electrónica de gran consumo. El plan consensuado ayer contiene las líneas básicas de actuación, pero carece aún de presupuesto financiero.

El ministro español de Industria, Claudio Aranzadi, planteó un programa similar para el textil y la confección, sectores que emplean a 1,5 millones de trabajadores en el conjunto de la Comunidad. España cuenta con 165.000 trabajadores en el sector, pero la inversión por puesto de trabajo (208.000 pesetas) es sóla la mitad de la media europea. Nuestro país es a la vez el que más compras hace a los competidores asiáticos, que penetran en los mercados con precios más baratos.

En España, según Aranzadi, está en marcha la negociación de un plan de salvación, cada vez más necesario por la liberalización comercial que se negocia en el GATT, que se presentará a la Comunidad.

Los servicios de la Comisión Europea estudian un programa de ayudas -se habla de 52.000 millones de pesetas en cuatro años- para las regiones más afectadas, especialmente de España, Grecia y Portugal. El ministro advirtió que no aceptará que se destinen para ello fondos del desarrollo regional de la Comunidad, que ya tienen determinados sus objetivos. "Ello no sería posible", según fuentes comunitarlas, "entre otras cosas porque un 30% del sector textil español está situado en Cataluña, región fuera de la acción del Feder".

Relaciones con Japón

Por otra parte, la Comisión Europea debatirá hoy en Bruelas la oferta negociadora a presentar a Japón para una apertura mutua de mercados. "No se establecerán ni cuotas de coches ni se Fijará por el momento la duración del período transitorio para mantener un tope máximo", manifestó al respecto un portavoz comunitario.

Los países de la Cornunidad Europea están dispuestos a abrir gradualmente sus fronteras a los automóviles japoneses a partir de 1993, pero a cambio exigen que Japón elimine las barreras existentes al acceso de productos europeos. Los fabricantes europeos piden que el lími,te máximo de penetración japonesa no supere la cota del 15% hasta el final de este siglo.