Las autoridades italianas consideran un "desastre bajo control" la situación del 'Haven' hundido

ENVIADO ESPECIAL Si el dios Neptuno sigue ayudando, las máquinas podrán evitar que las playas de la Riviera italiana y la Costa Azul francesa se conviertan en un inmenso charco de petróleo. "Desastre bajo control" afirmaban ayer las autoridades italianas a propósito de la catástrofe de] petrolero chipriota Haven. Emilio Martín, subdirector general de la Marina Mercante española, aseguró ayer que "la mancha de petróleo está a 540 kilómetros en línea recta de la costa española más próxima, que sería el cabo de Creus, y la posibilidad de que llegue es escasísima".

El petrolero chipriota Haven, sumergido a unos 60 metros de profundidad y a dos kilómetros de distancia de Arenzano, locali dad turística situada a unos 20 kilómetros de Génova, sigue constituyendo una sorda amenaza para la Riviera y la cercana Costa Azul. Entre el pasado jue ves, primer día de la catástrofe, y el domingo, día en que se hundió el Haven, navío construido en Cádiz hace 18 años, varios veci nos de Arenzano tuvieron que ser atendidos de problemas respiratorios.En sus entrañas duermen aún unas 100.000 toneladas de petróleo. "Situación bajo control", e la respuesta invariable de las autoridades italianas a ese hecho. Una "telecámara robotiza da", informan, vela al lado del hundido petrolero. Ese ingenio instalado por un submarino de bolsillo, envía a la superficie da tos sobre el estado del buque y debe permitir en los próximos días abordar la extracción po bombeo del crudo contenido en su panza.

En realidad, hablar de autoridades italianas es un poco eufé místico. Arenzano no está, ni mucho menos, tomado por efectivos de Policía, Marina y Protección Civil, y eso que el sábado el Gobierno italiano había declarado el estado de "catástrofe nacional". En la puerta del cuartelillo de la Policía Municipal, una funcionaria se ha convertido en el único interlocutor oficial de los periodistas.

El turismo, en peligro

"No pasa nada", dice la funcio naria. "Nuestra única preocupa ción es que, toda esta propaganda aleje los turistas de la Riviera y los lleve a España". "Pero", añade, "con lo cara que está la peseta los turistas deberían pensárselo dos veces".

Los pescadores del lugar desmentían ayer, sin embargo, esa impresión de normalidad, En la caseta de la Sociedad La Seorpina, un veterano apodado Biscottino contaba cómo el pasado sábado sus redes habían capturado pellas de crudo y gaviotas ennegredecidas. "No haga caso de lo que le digan en la prefectura de Génova o en el Ayuntamiento de Arenzano. Esto es una calamidad", dijo Biscottino.

La organización ecologista Greenpeace advirtió ayer en Roma que el crudo derramado por el Haven está superando en muchos puntos las barreras colocadas para evitar que la marea negra llegue a las playas, según informa la agencia Efe.

Las corrientes marinas del Mediterráneo, con la entrada de agua por el Estrecho de Gibraltar desde el Atlántico, impedirán que la mancha de petróleo se acerque a España. "Antes de llegar a España la marea negra tocaría toda la Costa Azul y es un litoral muy escarpado, con muchos entrantes e islas y el petróleo se quedaría allí", explicó ayer Emilio Martín, informa Alicia Rivera. "El derrame se va a contener, porque hay 18 unidades de superficie especializadas trabajando en la zona, y los italianos tienen 35 buques que pueden desplazar a la zona si es preciso, a los que se sumarían los de Francia y España", añadió Martín. Se han derramado unas 15.000 toneladas y el resto se va a bombear mediante operaciones de extracción de crudo de los tanques. "En los últimos 10 años se han producido 104 accidentes de contaminación en el Mediterráneo", agregó Emilio Martín.

El Gobierno francés ha puesto en marcha un plan de emergencia para prevenir los daños que la marea negra pueda causar en sus costas, según informa la agencia Efe. Cuatro navios equipados de sistemas de absorción de petróleo partieron ayer del puerto de Tolón para vigilar un eventual avance del crudo. La aspersión del mismo, según informaron sus autoridades, resulta difícil ya que la mayor parte de la mancha parece una "mousse de chocolate".

Sin embargo, según expertos alemanes, la extracción de crudo de petroleros hundidos, es una tarea relativamente fácil desde el punto de vista técnico, siempre que la nave esté más o menos intacta, informa la agencia DPA.