Inhumano

El día 4 publicó este periódico la carta de un minusválido de Madrid a quien los ruidos de dos disco-pubs situados debajo de su casa le impiden dormir por las noches. Uno, Oui, Monsieur, cierra a las cuatro de la madrugada. El otro, La Rue, lo hace a las tres, pero vuelve a abrir a las cinco, con lo que hasta las ocho de la mañana suministran al vecindario un festín de decibelios.Esto viene sucediendo desde hace dos años, pese a las continuas denuncias. "Es inhumano que no me dejen dormir", decía. Y lamentaba que, habiendo trasladado por escrito este problema al alcalde y al teniente de alcalde, la respuesta al ruido haya sido el silencio. No obstante, hace un año el Ayuntamiento le informó que uno de los disco-pubs había sido precintado, pero "lo cierto es que a estas alturas sigue abierto y molestando tanto o más que antes", replica el minusválido.

El minusválido, de 38 años, se llama Luis Pérez-Moliner. Sufre parálisis cerebral desde el nacimiento. Es licenciado en Psicología y se gana la vida trabajando de nueve a tres en el Inserso. Confiesa que sigue llamando a la policía, que pega la oreja, repite que los locales carecen de permisos, y se da la media vuelta.

El director de Oui, Monsieur, asegura que su local dispone de todas las bendiciones municipales. La encargada de La Rue admite que carecieron de licencia y de insonorización, por lo que fueron cerrados seis meses, pero añade que ahora están en regla. El secretario de la junta del distrito dice que "el Ayuntamiento precintará Oui, Monsieur, porque llevan meses abiertos sin permisos y con deficiencias". Del otro local no está informado, y se lava las manos en cuanto a horarios, porque eso, dice, compete al Gobierno Civil. Mientras tanto, el minusválido y otros igual que él seguirán sin dormir una noche más.