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Cuatro pacientes de La Paz se amotinan para que saquen de su habitación a un enfermo de sida

Cuatro pacientes de la residencia sanitaria La Paz amenazaron el pasado miércoles con salirse de la habitación donde estaban si permanecía encamado en ella un enfermo de sida, según reconoció ayer un portavoz del hospital. Para atajar el problema, la dirección del centro optó por sacar al enfermo e ingresarlo en otra habitación cuya localización no ha sido facilitada. Los enfermos, que presentaron una reclamación en el servicio de quejas, expresaron ayer su "sorpresa e indignación" porque el hospital no les informara de la enfermedad de su compañero de habitación.

Uno de los cuatro enfermos que amenazaron con abandonar la habitación -la 202 de la planta segunda del área de rehabilitación y traumatología- es Julio Simón López, de 32 años. Éste indicó ayer que no entendía por qué se mezcla a un enfermo de sida con pacientes con problemas traumatológicos, como es su caso. Simón López, que sufre una fractura abierta en su brazo derecho, argumentó en su nombre y en el de sus otros compañeros: "Nos molestó que metieran al enfermo con nosotros sin prevenirnos de que tenía sida"."Tenernos un servicio común para todos los pacientes de la habitación; ahí [en el aseo]", agregó, "están las toallas de todos, y puede que algunos nos confundamos y nos sequemos con la toalla que el enfermo de sida ha utilizado después de afeitarse, por ejemplo".

Antonio Moral Moral, de 34 años, que también ocupa esta habitación, subrayó que no le convencía el argumento dado por la dirección del centro al respecto. "El sudirector del hospital nos ha dicho que si no hay contacto vis a vis no hay ningún problema de contagio", refirió Moral.

Guantes y mascarillas

"Si eso es así", cuestiona Simón López, "¿cuál es la razón por la que los médicos que venían a visitarle siempre iban con mascarillas y guantes; nosotros no podemos movernos de la cama y carecemos de esa protección". Simón López asegura que conoció que su compañero de habitación, que responde al nombre de Carlos, estaba enfermo de sida porque así se lo escuchó decir a los médicos.Un miembro de la Comisión de Seguimiento del Sida de La Paz reveló ayer que no existe ningún precedente de contagio de esta enfermedad entre enfermos. Por otra parte, el portavoz del hospital que no se puede "discriminar" a los enfermos por razón de su enfermedad y que los médicos se pueden acoger al secreto profesional para no revelar los diagnósticos de sus pacientes.

Al enfermo de sida le fue asignada esa habitación porque no había otra disponible cuando ingresó. Este portavoz se preguntó ayer: "¿Dónde metemos entonces a los pacientes que tengan sida? ¿Los escondemos o qué hacemos con ellos? "Es un problema de conciencia; no podemos marcar a los enfermos e ir diciendo por ahí: ¡cuidado, que éste tiene sida!".

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Instalaciones exclusivas

Este portavoz, que afirma que en caso de que no haya camas en un área médica determinada es habitual encamar a enfermos de sida en cualquier habitación, subraya que en La Paz ni en ningún otro sitio existen instalaciones dedicadas exclusivamente a este tipo de pacientes."Se les hospitaliza en las áreas adecuadas a la enfermedad específica que presentan, pero no porque tengan sida", dijo. A este enfermo, en concreto, le fue habilitada una cama en el servicio de rehabilitación y traumatología "porque ese día había falta de camas", matizó este portavoz.

Los cuatro enfermos se quejan también de que en la actualidad comparte habitación con ellos otro paciente que sufre un cuadro de fiebre tifoidea "que puede ser contagiosa", dicen. Un médico que realiza su servicio en esa planta confirmó que, efectivamente, ese otro enfermo tiene fiebre tifoidea, pero no existe ningún peligro de contagio.

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