La CE reestructura el sector de la motocicleta para ahorrar un 30% de los costes

La fabricación de motos y ciclomotores de la CE será sometida a una amplia restructuración para poder hacer frente a la penetración japonesa, según el plan de armonización aprobado ayer en Bruselas por la Comisión Europea. La armonización de normas y la simplificación de las más de 15 definiciones en dos grandes categorías para toda la Comunidad permitirá reducir unos sobrecostes calculados en un 30% del total. Italia y España son los países más afectados.

El proyecto de reglamento marco aprobado ayer por la Comisión Europea será complementado con 24 reglamentos específicos que entrarán en vigor en 1 de enero de 1993. La armonización de normas técnicas persigue una mayor competitividad para un sector atomizado, pero a la vez incluye normas de seguridad en la circulación más severas.Las más de 15 definiciones de motos vigentes en la actualidad en los 12 países de la CE quedarán reducidas a dos grandes categorías, de acuerdo a que la cilindrada sea superior o inferior a 50 centímetros cúbicos. La velocidad de las motocicletas por debajo de esta cilindrada menor quedará limitada a un máximo de 45 kilómetros por hora, aunque la Comisión Europea propone reducir este límite a 25 kilómetros por hora para los ciclomotores del tipo Mobylette. El objetivo es reducir los riesgos que representan que no sea necesario tener carné de conducir y, según países, tampoco sea obligatorio circular con casco protector o disponer de seguro obligatorio.

Al margen de las medidas de seguridad, el plan de reestructuración pretende aumentar la competitividad de un sector fuertemente amenazado por la penetración de las motos japonesas de alta cilindrada. Italia, España y Francia representan el 89% de los 1,5 millones de unidades producidas en la Comunidad. La producción mundial supera los 10,5 millones de unidades, de los cuales 4,6 millones son de menos de 50 centímetros cúbicos de cilindrada.