El frente opositor marroquí se consolida tras la marcha proiraquí

FERRAN SALES. El frente democrático marroquí, configurado oficiosamente por las fuerzas de la oposición, se ha visto reforzado tras la marcha celebrada el domingo en Rabat en favor del pueblo iraquí. A esta conclusión han llegado las fuerzas políticas convocantes de la manifestación y, los observadores diplomáticos en Rabat.Los periódicos de la oposición Al Alam y L'Opinion, portavoces del partido del Istiq1al, e Ittihad Ichtirachi, de la Unión Socialista de Fuerzas Populares (USFP), destacaban en la edición de ayer el éxito conseguido con la marcha en favor de Irak y aseguraban que el número de asistentes a la misma se aproximó a los 700.000, si bien no descartaban la posibilidad de que hubiera podido participar hasta un millón de personas. La prensa occidental, incluido El PAÍS, señalaba en las ediciones de ayer que el número de manifestantes era aproximadamente de 300.000. La prensa oficial no da una cifra de asistentes.El periodista Naim Kamal, del periódico L'Opinion, asegura que los manifestantes fueron 25 millones. Con esta afirmación literaria pretende asegurar que el corazón de todo el pueblo marroquí estuvo junto con los manifestantes que se concentraron ayer más de tres horas en el centro de Rabat. Kamal recuerda que en la concentración se quemaron diversas banderas pero asegura que faltó una. Es una alusión clara y directa al hecho de que los organizadores se negaran a la quema de la bandera española.Precisión de la embajada

[La embajada de Marruecos en Madrid publicó ayer un comunicado, referente a, las informaciones aparecidas sobre la protesta contra España y Felipe González, en el que afirma que la manifestación no fue un acto antioccidental ni antiespañol, sino de solidaridad con el pueblo iraquí. "La marcha tenía como lema oficial", dice el texto, "acordado por el comité organizador, manifestar la solidaridad de las fuerzas convocantes a la población iraquí, y su apoyo a la paz y el cese de la guerra, lo que despoja de cualquier aramento el alarmismo desatado por los medios de comunicación en el sentido de que se trata de una manifestación antioccidental y antiespañola"].

Al margen de la polémica sobre la protesta contra España y Felipe González -que pasó absolutamente inadvertida para la mayoría de los asistentes a la marcha- o sobre el número de manifestantes, la oposición comcide en asegurar que la concentración es un triunfo de la democracia, "confirma la madurez del pueblo, la representatividad de los partidos de Ia oposición y su capacidad, no sólo de movilizar las masas, sino también de expresar sus sentimientos". La cita está extraída de un artículo publicado también por el rotativo istiq1alí L'Opinion, firmado por su director, Khalid Jamai.