El miedo masculino a la paternidad, tema de 'El fin de la noche'

Son cosas de las que no suele hablarse, pero a muchos hombres la perspectiva de ser padres les llena de inseguridades. El británico Keith McNally se ha atrevido a hablar sobre el tema en una película, El fin de la noche, que se estrena mañana en Madrid. El filme se presentó en Cannes y, en la sección Zabaltegi de San Sebastián.El protagonista de El fin de la noche se siente amenazado por el embarazo de su mujer y, para huir, se obsesiona con una desconocida. El mundo se le va hundiendo, y él sufre problemas psicosomáticos. La tragedia le rodea.

"Tengo tres hijos y estoy encantado con ellos", dice Keith McNally, "pero cuando iba a llegar el primero me sentía arrinconado, olvidado. La sociedad nos ensena que un nino siempre es motivo de felicidad, pero creo que los hombres establecemos una relación amorosa con los hijos sólo según va pasando el tiempo. Yo me sentía mal, porque no experimentaba amor por el niño que iba a nacer. Las mujeres los llevan dentro nueve meses, y para ellas es distinto".

McNally, que confiesa sentirse "inhibido" en Gran Bretaña por el sistema y el gobierno, rodó su filme en Nueva York. "Quería que pareciese una ciudad europea, sin elichés. Usé el blanco y negro, que es para mí el auténtico color. De todas formas, creo que lo principal no es el estilo, sino tener algo que contar".

El equipo de El fin de la noche merece mención. El fotógrafo, Tom DiCillo, trabajó con Jim Jarmusch en Extraños en el paraíso. La montadora, lla von Hasperg, fue ayudante de Fassbinder, y el autor de la música, Jürgen Knieper, hizo la banda sonora de Cielo sobre Berlin, de Wim Weriders.