EE UU y la CE condenan la sangrienta represión

"No hay justificación posible para el uso de la fuerza contra gobiernos elegidos democrática y pacíFicamente", dijo e presidente de Estados Unidos, George Bush anoche a condenar la intervención de las tropas soviéticas en Lituania. Bush efectuó sus declaraciones al regresar ayer a la Casa Blanca desde la residencia de Camp David. El presidente norteamericano advirtió a la URSS que los acontecimientos del sábado puede dañar seriamente las cálida relaciones establecidas con Moscú. Bush efectuó un llamamiento al Gobierno de la URSS para que se abstenga del uso de la fuerza en Lituania.En su mensaje, el presiden te de EEUU no se dirigió directamente al presidente de la URSS, Mijaíl Gorbachov sino que habló del Gobierno de ese país, informa desde Washington Carlos Mendo.

Por su parte la Comunidad Europea expresó ayer su condena enérgica" de la sangrienta represión en Lituania y pidió explicaciones sobre Ios órganos que han dado la orden de abrir fuego sobre personas civiles desarmadas" Los ministros de Exteriores de los Doce mantendrán hoy una reunión de urgencia en Bruselas para analizar est "desviación inquietante" en el comportamiento de las autoridades de la URSS. El responsable de la diplomacia belga, Mark Eyskens, recorda que "la ayuda europea está condicionada a la continuación del proceso democrática de la URSS".

Reunión de la OTAN

El comunicado de condena comunitario coincidió con una reunión de urgencia de Comité Político de la OTAN en la que se decidió volver a reunirse hoy para evaluar con más detalle los acontecimientos. La Alianza Atlántica se remite al texto oficial aprobado el viernes en el que se pedía a la URSS "abstenerse de todo acto de intimidación y del recurso a la fuerza", as como una solución negociada "conforme a las aspiraciones legítimas de las repúblicas bálticas". El secretario general de la OTAN, Manfred Wörner, y el presidente de la Comisión Europea, Jacque Delors, mantendrán hoy una reunión en Bruselas en la que analizarán la posición de las dos organizaciones ante los graves sucesos de Lituania.

Fuentes diplomáticas manifestaron que la Alianza Atlántica decidió ayer no sacar un nuevo comunicado, esta vez con una condena tajante de la Intervención militar soviética, para "no evocar el enfrentamiento Este-Oeste". Sin embargo, según un alto responsable de la OTAN, "el tiempo de silencio se ha terminado, porque disparar a la no es exactamente lo que quieren los occidentales".