Las empresas de la autovía de Leizaran no iniciarán las obras hasta que ETA retire las amenazas

Los empresarios del consorcio Utelan, adjudicatarios de las obras de la autovía de Leizarán, se niegan a renunciar al contrato con la Diputación Foral de Guipúzcoa alegando un importante quebranto económico, al tiempo que condicionan el inicio de los trabajos a que la organización terrorista ETA retire sus amenazas. La Diputación Foral de Guipúzcoa cree, por su parte, que estas declaraciones no modifican la actual situación y estudia, como adelantó el lunes el diputado general, Imanol Murua, la fórmula legal para rescindirles el contrato de adjudicación lo antes posible.

Utelan, formada por seis empresas de construcción vascas, ha asegurado que comenzará de forma inmediata las obras de esa carretera una vez que ETA revoque públicamente sus amenazas contra la ejecución de la autovía. Estas, según los empresarios, se fueron incrementando en la medida que la fecha del inicio de los trabajos, el 7 de enero, se fue acercando. Ello, añaden, "suponía un grave riesgo para la seguridad de los trabajadores, sus directivos e incluso sus familiares".En un comunicado difundido ayer por los empresarios afectados en la construcción de la autovía, éstos añaden que el riesgo que supone la actitud de los terroristas es riesgo que no tienen obligación de asumir. "Es un riesgo que va más allá", afirman, "del que racionalmente pudieran [las empresas] hacer frente como propio de una actividad de esta índole, y que por tanto ni legal ni contractualmente estaban obligados a soportar".

Quebranto económico

Indican asimismo que si las empresas se viesen privadas definitivamente de la obra su decepción sería grande y además les supondría un importante quebranto económico.

La postura adoptada por los empresarios, negándose a renunciar al contrato, deja a la Diputación en una difícil situación, ya que es su deseo iniciar las obras en la mayor brevedad de tiempo, para lo cual tiene que rescindirles el contrato. A pesar de la exigencia de la institución de que renunciasen a la adjudicación, no lo han hecho debido a que consideran que legalmente no podrían hacerlo en ningún modo".

El equipo de los servicios jurídicos de la Diputación Foral de Guipúzcoa lleva varios días estudiando las medidas legales que se pueden adoptar en este tema. A última hora de la tarde de ayer seis integrantes de este grupo se encontraban reunidos intentando buscar la fórmula que permitiese a la institución foral obligar a las empresas a renunciar al contrato o rescindirles éste de forma autornática.

En tanto no se anule el citado contrato, la Diputación Foral de Guipúzcoa no puede iniciar un nuevo plazo de licitación para que otras constructoras se presenten y ello retrasaría el inicio de los trabajos en la zona de Guipúzcoa. Es probable que durante la jornada de hoy la institución provincial dé a conocer una solución a este tema.

En Navarra, los tres tramos de la autovía estarán iniciados el próximo mes de febrero y si los plazos previstos por las constructoras se cumplen, en 1993 quedaría finalizado el trazado en esa comunidad.

Las entrevistas de HB

El dirigente de Herri Batasuna Jon Idígoras se refirió ayer a las entrevistas que durante este mes han estado manterilendo responsables de HB con los empresarios y dijo de éstas que tenían como objetivo "contrastar" opiniones.

Los empresarios, sin embargo, entendieron las mismas como claramente intimidatorias y amenazantes. Fue tras la última reunión que mantuvieron con representantes de la Mesa Nacional de HB cuando los empresarios decidier,i:)n no comenzar las obras en Guipúzcoa.