El GATT suspende la Ronda Uruguay como último recurso para buscar un pacto el próximo año

Las diferencias agrícolas llevaron al fracaso la Ronda Uruguay, después de cuatro años de negociaciones infructuosas. Estados Unidos exige reformas agrícolas que la CE considera "inaceptables". El presidente de la Ronda, el uruguayo Héctor Gros Espiell, anunció ayer la suspensión de la conferencia final de Bruselas ante la imposibilidad de "lograr en 12 horas un compromiso". "No se trata de una quiebra ni de una ruptura, sino sólo de una prórroga", dijo. Las conversaciones entre los 107 países implicados se reanudarán a nivel técnico el próximo año en Ginebra. La representante estadounidense, Carla Hills, advirtió que sólo acudiría a negociar "cuando se vea que existe una base para lograr un acuerdo".

El representante de la CE, el vicepresidente de la Comisión Europea, Frans Andrieseen, entró poco después de las once de la mañana en la Sala Verde con la intencíón de explicar una mayor flexibilidad negociadora de los Doce. No se le dejó explicarse, pues ya se había anunciado que la Ronda Uruguay quedaba suspendida. Una hora y media antes, el director general del GATT, el suizo Arthur Dunkel, había anunciado a los periodistas que"la Ronda se prolongaba para continuarla en Ginebra bajo su responsabilidad".La primera potencia comercial, la CE, por boca de su máximo portavoz, admitió que habían sido pillados por sorpresa y que "el desarrollo de lo acontecimientos ha echado abajo nuestra voluntad negociadora". Los primeros en enterarse, antes que Dunkel, fueron los empleados del Hotel President de Bruselas, copado por la numerosa delegación americana, que fueron informados a primera hora de la manana de la cancelación de reservas.

Acuerdo posible

Hills hizo un esfuerzo por explicar que es posible un acuerdo con "nuestros amigos europeos" al responder sobre la contradicción que representa una posible guerra comercial entre los aliados en la crisis del Golfo. Aseguró, sin embargo, que "la CE necesita primero demostrar la suficiente voluntad política que les permita seguir negociando".

El capítulo agrícola es la clave para obtener un acuerdo. El bloque liderado por Estados Unidos exige como mínimo el borrador presentado en la noche del jueves por el presidente del grupo y que significa duplicar la oferta comunitaria. La CE aceptó flexibilizar su postura en apertura de mercados y límites a las subvenciones a la exportación, pero Ias reformas agrícolas" demandadas por Carla Hills son, a juicio de Andriesen "inaceptables" por razones sociales y políticas.

Un representante de la Comunidad aseguró que para continuar la Ronda hace falta saber "quién cede primero". La CE insistió en que Estados Unidos y otros países "han colocado el listón muy alto con opciones exageradas". La Comunidad está dspuesta a recortar un 30% los subsidios al campo, mientras estadounidenses y los 14 países del grupo de Cairns piden un 75%. El paquete agrícola es la parte más sustancial de la nueva tarta comercial en juego.

La Ronda Uruguay, la octava en la historia el Gatt, introduce la agricultura por primera vez en las reglas de liberalización del comercio. Lo mismo sucede con los servicios, inversiones extranjeras y marcas y patentes.

La CE considera que Ias mejoras ofrecidas son algo ya asumido" y, según Andriessen, "se puede intentar todavía adecuarlas". Sin embargo, "la falta de acuerdo obedece a que no hemos recibido contrapartidas; no se ha producido el toma y daca". Según Carla Hills, para el desbloqueo hace falta que "los jefes de Estado y de Gobierno de la CE adopten en la cumbre de la próxima semana en Roma la misma actitud que el presidente Bush".