Temor entre los palestinos a la venganza de los extremistas israelíes
GEORGINA HIGUERAS, ENVIADA ESPECIAL, Los cuatro israelíes asesinados el domingo fueron enterrados ayer en medio de un enorme despliegue militar -tres eran soldados- en las distintas ciudades en que vivían. Mientras tanto crece el miedo entre los palestinos sobre las eventuales represalias que puede tomar la extrema derecha israelí contra ellos. "En esta situación tan tensa a nadie le interesa moverse. La venganza vendrá antes o después, pero es mejor no darle pie", afirma un comerciante de Jerusalén este.
"Cuando olmos noticias como ésas no nos alegramos, por el contrario, sabemos que tendremos que pagar el precio. El mismo domingo por la noche se llevaron detenido a un chico de 15 años que ya tiene a su hermano en la cárcel", añade.Israel ha exigido a El Cairo una investigación rápida y clara del incidente protagonizado por un egipcio en territorio israelí, en las cercanías de la ciudad de Eilat, a pocos kilómetros de la frontera con Egipto. "Hemos pagado un alto precio por la paz con Egipto y no soportaremos que después de toda la sangre derramada para alcanzarla, continuemos pagando con nuestra sangre", dijo ayer el ministro de Exteriores israelí, David Levy.
La declaración de la Jihad islámica, la organización que ha reivindicado el atentado, de que está preparando otros ha erizado aún más los nervios de los militares israelíes. En un comunicado hecho público en Ammán se afirma: "El grupo [que cometió el asesinato] ha vuelto sano a su base y éste y otros grupos continúan preparando nuevos ataques más dolorosos".
Las autoridades israelíes exigen que el supuesto asesino, que logró escapar y cruzar la frontera nuevamente pero fue detenido por la policía egipcia, sea juzgado inmediatamente. El joven cumplía su servicio militar como guardia fronterizo.
Tensión fronteriza
La frontera con Líbano está guardada por la llamada zona de seguridad, un territorio tomado por Israel del vecino país para asegurar que nadie entre en el suyo. Las fronteras con Siria y Jordania están protegidas por alambradas electrificadas y todo tipo de vigilancia electrónica. La de Egipto es la única frontera permeable y pacífica de Israel, de ahí su miedo a que ahora se convierta en la vía de entrada de fanáticos árabes dispuestos a morir si se llevan con ellos a algún judío.
Israel también ha advertido a Jordania para que controle a sus hombres. A pesar de la mencionada vigilancia fronteriza, las cinco últimas semanas han muerto dos soldados israelíes en las tres incursiones habidas. El diario oficial sirlo Tishreen destacó ayer que el ataque suicida cometido el domingo por una joven de 19 años en el sur de Líbano, en el que fueron heridos dos soldados israelíes, muestra que "la situación en Líbano seguirá siendo inestable hasta que Israel retire sus fuerzas". Según ese diario, "el cinturón de seguridad que Israel ha tratado de construirse no le servirá".
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