'No tienen ni idea"

"Los veterinarios y los ecologistas no tienen ni idea. El resultado de impedir el tráfico de especies es que los animales terminan siendo sacrificados por los aduaneros", afirma rotundo el dueño de una tienda especializada en reptiles del centro de Madrid. "Los que poseen animales exóticos suelen ser naturalistas y desde luego los perros y gatos transmiten más enfermedades que las boas", añade.Wolfi asegura tener 30 tortugas en un habitación de su casa. "Algunas las colé en la maleta y a otros animales los he salvado de morir en un mercado como me ocurrió en Nicaragua", dice.

Nacho, de 22 años, que dice haber tenido reptiles desde los 12 años, tiene ahora dos boas constrictor de unos tres metros de longitud. 'Las tengo en un terrarium a la temperatura adecuada y no hay ningún problema. Sí hay gente exhibicionista y snob, pero lo normal es que los propietarios de estos animales los cuiden porque, entre otras cosas, nadie tira las 50.000 o 100.000 pesetas que valen".

Los tres recomiendan a las instituciones y grupos ecologistas preocuparse más por la fauna autóctona española y aseguran que desde hace unos años es muy dificil conseguir especies raras: "Si no fuera así las tendríamos".