El Convenio de Londres estudia suspender la moratoria de vertidos nucleares al mar

El responsable de la división de residuos radiactivos de la Agencia de Energía Nuclear de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Jean-Pierre Olivier, no descarta la posibilidad de que en un plazo mínimo de dos o tres años el Convenio de Londres pueda suspender la moratoria, que data de febrero de 1983, sobre el vertido de residuos nucleares al mar. Este químico francés, que participa en El Escorial en un seminario sobre residuos dentro de los cursos de verano de la Universidad Complutense, declaró a este periódico que la mejor solución para la nuclear Vandellós 1 sería esperar 30 o 40 años para su desmantelamiento, "ya que si se inician ahora esas operaciones, los trabajadores que participen en ellas correrán más peligro de verse afectados por la radiactividad".Según Olivier, "echar bidones con residuos radiactivos al mar es una operación que presenta riesgos insignificantes. La polémica que ha rodeado este asunto es el resultado de posiciones políticas influidas por cierta demagogia y un ecologismo sentimental. Dentro de la Convención de Londres existe un enfrentamiento entre partidarios y adversarios de la moratoria, pero países de gran influencia como EE UU, la UR SS, Francia y el Reino Unido están a favor de que se suspenda la moratoria". Olivier cree que España está a favor de la moratoria porque en su momento el PSOE eligió esta postura dentro de su plataforma electoral.

Según Jean-Pierre Olivier, el porvenir de la central nuclear Vandellós 1 es "un asunto tanto político como económico". "Se puede elegir un desmantelamiento rápido para satisfacer a la opinión pública, pero una solución más segura, más fácil y menos cara consistiría en esperar 30 o 40 años para que disminuya la radiactividad en el núcleo de la central". Respecto a la idea planteada por Hifrensa, la empresa explotadora de la central, sobre la posibilidad de construir una central de gas en Vandellós 1 utilizando las instalaciones existentes, Olivier dijo que en este caso no se podría utilizar la parte nuclear de la central. Olivier comentó que "existen reglamentos muy estrictos sobre el transporte de residuos nucleares", y dijo que no existe tráfico ilegal de desechos ni en Europa ni de este continente hacia África. Cuando España envía elementos radiactivos de sus centrales atómicas a instalaciones francesas "sólo lo hace para su reprocesamiento y no para su depósito", sentenció. Sobre las tecnologías que se ensaya para enterrar residuos nucleares de alta actividad, afirma: "Las soluciones experimentales existen, pero no habrá almacenes subterráneos hasta el 2010.