Economía, entre la preocupación y el moderado optimismo

El Ministerio de Economía y Hacienda resaltó ayer en un comunicado que el IPC de julio ha sido "moderadamente positivo", ya que su incremento fue inferior al registrado en el mismo mes del pasado año. Sin embargo, no oculta su preocupación "por el lento ritmo en la desaceleración de la inflación subyacente y, dentro de ella, el fuerte avance en los precios de los servicios".La inflación subyacente -que excluye los precios de los alimentos no elaborados y de los productos energéticos para descontar los grupos de productos más aleatorios-, ha aumentado en julio un 0,4% lo que sitúa su tasa de los últimos doce meses en el 6,7%, una décima menos que la registrada en junio último.

Dentro de la inflación subyacente, los precios de los pro ductos industriales crecieron un 0,3% y los de los servicios sin alquiler, un 0,6%. Las tasas anuales de variación continúan moderadas en los precios industriales (4%), mientras que en los servicios se encuentran en el 9,4%, muy por encima de la alimentación (5,6%). Dentro de los servicios, los precios en el sector turístico han registra do un avance del 10% en el último año.

Como resultado del índice de precios de julio, las centrales sindicales mostraron ayer sus dudas sobre la posibilidad de que se alcance al final del año el objetivo oficial del Gobierno (5,7%). Para CC OO el IPC de julio indica que se mantienen las tensiones inflacionistas, lo que "pone de manifiesto el error de mantener una política económica que no consigue sus objetivos a pesar de incurrir en graves costes sociales".

En su opinión, "el uso de una política monetaria muy restríctiva con el objetivo de enfriar la economía, tan sólo ha logrado hasta la fecha la ralentización en la creación de empleo". Según CC OO, los recientes acontecimientos en el Golfo Pérsico no tienen que servir de excusa para imponer elevados aumentos en el precio de los combustibles.

En este sentido, UGT afirma en su comunicado que la previsible reacción al alza en los precios de los carburantes, "hace más verdad que nunca la afirmación de que la inflación no está en absoluto controlada en España".

Para UGT, el buen comportamiento de los precios en los meses anteriores a julio ha ocultado la situación real de la inflación, pero el aumento de julio ha acentuado "la sensación de tristeza que provoca pensar que un simple pollo pulveriza de nuevo las previsiones en política económica".