Informatizar el Archivo Histórico, objetivo de la nueva directora

La informatización del Archivo Histórico Nacional, proyecto en marcha en estos momentos, "agilizará las consultas y las prestaciones" de los fondos, según declaró ayer en Zaragoza la nueva directora, Concepción Contel. El estudio de la informatización lo llevan a cabo el Ministerio de Cultura y la Subdirección General de Informática.La nueva directora opina que el Archivo Histórico Nacional, "si no la niña de los ojos, es uno de los proyectos estrella del Ministerio de Cultura", y que habrá presupuestos suficientes para informatizar "aquellos documentos suceptibles de ello". Añade que el archivo figurará con entidad propia en las conmemoraciones de 1992 aportando documentos de los Archivos de Indias y Ultramar.

El Archivo Histórico Nacional consta de 142.000 legajos además del departamento de pergaminos y papel, libros, carpetas, mapas y planos. El primer documento data del siglo IX y los legajos abarcan hasta el siglo XX, con los fondos generados por la guerra civil, las represalias políticas o el tribunal de represión del comunismo y la masonería. Otro gran proyecto del Ministerio de Cultura es el traslado del archivo a un nuevo edificio, todavía no concretado en estos momentos. "El actual es muy pequeño, no se pueden recibir más documentos y los actuales depósitos no reúnen condiciones en un edificio de 1950", según la directora.

Una pesadilla

Una tarea importante -"una auténtica pesadilla"- que tiene por delante el nuevo equipo directivo del archivo es agilizar las entregas de los documentos que solicitan los investigadores. Concepción Contel opina que los datos facilitados por algunos investigadores sobre los plazos de entrega, hasta un año, "están inflados". Ahora puede tardarse en entregar un documento, en su opinión, entre seis y siete meses, que con todo considera "excesivo". "A primeros de septiembre nos vamos a poner a trabajar para agilizar las entregas, para tener contentos a los investigadores. No digo que a finales de año nos vayamos a poner al día, pero sí que vamos a cortar los plazos".

La nueva directora nació en Teruel, es funcionaria del cuerpo facultativo de archiveros, bibliotecarios y arqueólogos, fue durante cuatro años profesora de la Universidad de Zaragoza y su tesis doctoral trató sobre el Císter en Aragón.

Ha sido directora de varios archivos, entre ellos el del Ministerio de Relaciones con las Cortes, el del Tribunal Supremo y el General de Indias. Es autora de varias obras.