La paralización de las obras de un ambulatorio deriva a 140.000 asegurados al Doce de Octubre

La asociación de vecinos de Villaverde Cruce ha denunciado las molestias que origina a los beneficiarios de la Seguridad Social la duración excesiva de las obras de remodelación del ambulatorio de este barrio. Los trabajos, iniciados hace dos años, están interrumpidos desde hace dos meses por un problema de cimentación que hace necesaria una ampliación del presupuesto. A causa de las obras, los cerca de 140.000 pacientes de la zona tienen que desplazarse hasta el hospital Doce de Octubre para visitar a su médico especialista, mientras que el ambulatorio se ha convertido en un picadero de toxicómanos, según los vecinos.

Las obras del ambulatorio, incluidas dentro del programa de remodelación de estos centros diseñado por el Insalud, determinaron el traslado de los médicos especialistas que pasaban consulta en el inmueble y de sus pacientes a otras dependencias sanitarias.Por este motivo, desde el 1 de julio de 1989, los titulares de las 70.000 cartillas de la Seguridad Social censadas en el distrito de Villaverde, que con una media de dos beneficiarlos por titular se convierten en 140.000 hipotéticos pacientes, incrementan la ya abultada cifra de enfermos que acuden a las consultas externas del hospital Doce de Octubre.

Consultas compartidas

Según la doctora Carmen González, subdirectora médica de este hospital, el traslado de las especialidades médicas del ambulatorio de Villaverde al Doce de Octubre ha doblado el número de personas que reciben atención médica ambulatoria en el centro, con el consiguiente problema de espacio y tiempo.

"Se ha tenido que reducir el número de horas de visita tanto para los médicos procedentes de Villaverde como para los facultativos dependientes de este hospital, dado que tienen que utilizar las mismas salas de consulta y el mismo material sanitario", dice González.

Las cifras facilitadas por el hospital sitúan en 34.000 las consultas mensuales que realizan allí los facultativos del ambulatorio cerrado, las mismas que llevan a cabo los médicos dependientes del propio Doce de Octubre entre sus secciones general y materno-infantil.

Las obras de remodelación del ambulatorio de Villaverde Cruce, situado en la calle de la Alcarria, pretenden, según fuentes de la Dirección Provincial del Insalud, mejorar la infraestructura del edificio, que data de hace más de 20 años, y adecuarlo a las necesidades del servicio que realiza.

"Los trabajos iban a buen ritmo hasta que se descubrió la deficiente cimentación del inmueble, asentado sobre un lecho de cenizas, que hacía imposible la continuación de las obras tal y como estaban previstas", dice Carmen Aguayo, directora del área sanitaria número 11, a la que pertenece el ambulatorio.

Desde el pasado mes de junio, las obras de remodelación se han paralizado totalmente, "porque las nuevas circunstancias descubiertas requieren la realización de un nuevo proyecto para reforzar los cimientos, lo que precisa una nueva partida presupuestaria o la ampliación de la prevista inicialmente", añade Aguayo.

Los vecinos de la zona, que se quejan de la incomodidad de tener que acudir al Doce de Octubre para cualquier consulta y de las aglomeraciones que se forman en este centro por la ingente cantidad de pacientes que atiende, exigen la reanudación inmediata de las obras del ambulatorio.

"Si hace falta más dinero, que el Insalud lo facilite con carácter de urgencia, porque no estamos dispuestos a consentir que el lugar donde debería recibirnos nuestro médico se haya convertido en una obra abandonada que sirve de refugio a los toxicómanos y camellos del barrio, con el consiguiente peligro para nuestros hijos", dice Teresa Tomás, presidenta de la asociación de vecinos de Villaverde Cruce.