El líder integrista argelino amenaza a los periodistas durante la reunión magrebí

Abassi Madani, máximo dirigente del partido integrista Frente Islámico de Salvación (FIS), lanzó duros ataques a la prensa y amenazó a determinados periodistas en el transcurso de una singular apertura de la cumbre magrebí, celebrada en el salón de actos de la alcaldía del barrio de Kuba, a pocos kilómetros del centro de Argel. A esa misma hora se ultimaban en el Palacio de las Naciones los detalles de la reunión de los cinco jefes de Estado de la Unión del Magreb Árabe (UMA), una sesión relámpago que duró menos de 12 horas.Abassi Madani echó un pulso a la UMA y a los cinco jefes de Estado del Magreb (Argelia, Libia, Marruecos, Mauritania y Túnez) y decidió convocar una conferencia de prensa el mismo día y en la misma hora que se iniciaban los trabajos de la cumbre. Mientras el paquebote Marraquech, a bordo del cual viajaba Hassan II, llegaba con 24 horas de retraso al puerto de Argel, medio centenar de periodistas de todo el mundo ocupaban el salón de actos de la alcaldía de Kuba.

La convocatoria del líder del FIS había despertado la expectación en medios políticos, por cuanto se trataba de las primeras declaraciones del dirigente integrista argelino tras las manifestaciones oficiales del Frente de Liberación Nacional (FLN) y del presidente de la república, Chadli Benyedid, oponiéndose a la disolución de la Asamblea Popular Nacional y a la convocatoria de las elecciones generales anticipadas.

Madani no defraudó. Lanzó un largo y virulento discurso en el que atacó duramente a la prensa y a determinados periodistas. Dio nombre de publicaciones e identificó a profesionales que en su opinión debían ser considerados como "enemigos del pueblo argelino". Los acusó de intentar distorsionar la historia oponiéndose a la voluntad islámica de todo un pueblo.

Autoinvestido con su tono hierático, Madani dio la bienvenida a los cinco jefes de Estado de la UMA. Abogó para que llevaran a buen término su trabajo de unificación y colaboración. Desde su púlpito-escenario el líder integrista pretendía convertirse, de nuevo, en presidente del país.

Los cinco países integrantes de la UMA han acordado establecer un mercado común.El diseño incluye una serie de medidas estratégicas entre las que se encuentra la unión aduanera antes de 1995, la libre circulación de productos agrícolas, la desaparición de la doble imposición fiscal y la creación de una compañía aérea magrebí.