Nace un refugiado
"Como éramos pocos...", habrán pensado los más de 3.000 refugiados albaneses en la embajada de la RFA en Tirana cuando en la noche del sábado una mujer diera a luz a una niña, en medio de misérrimas condiciones sanitarias, con ayuda del médico de la legación.Mientras, el Gobierno de Tirana, que cvfha anunciado que dará pasaporte y visados a los refugiados, ha impedido el aterrizaje de un avión con medicamentos y alimentos destinado a la sede diplomática de la RFA donde los refugiados han caído en aluvión desde que se inició la crisis.
La vida continúa en Tirana, como bien lo simboliza el nacimiento de un refugiado, y pone de relieve una vez más que detrás de toda crisis hay mujeres y hombres. El hombre fuerte de Albania, Ramiz Alia, sabe de qué se trata, mantiene en alto el señuelo de las reformas y depura su Gobierno con la abierta intención de rellenar la grietas en su otrora monolítico régimen.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.