La pureza de El Inclusero
Jiménez /Inclusero, Catraleño, Viña, Correas
Cuatro toros de Jimenez Pasquau, con trapío y mansos; 22 y 42 de Carlos Núñez, terciados, de juego desigual. El Inclusero: vuelta; ovación. Catraleño: vuelta; vuelta protestada. Rafi de la Viña: ovación en los dos. Un toro de Jiménez Pasquau, para rejoneo. Plaza de Alicante, 17 de junio. Primera corrida de feria. Media entrada
El Inclusero puso de manifiesto, pese a la escasez de sus contratos, la pureza y el sentimiento de su toreo. Estas dos condiciones son difíciles de encontrar en estos tiempos de lidia vulgar y posmoderna. Ocurre que la fiesta es un reflejo de la sociedad: tanto tienes o toreas, tanto vales.
Por esa razón diestros como El Inclusero son fresca brisa para los buenos aficionados, por desgracia también tan escasos. El coletudo dio tres excelentes lances a pies juntos al quinto, para luego lucirse con dos verónicas con cante, como lo fue la chicuelina que instrumentó posteriormente. El sabor añejo también lo desparramó con la sarga y en series con ambas manos perfectamente abrochadas con el pase de pecho. La esencia subió de tono en varias trincherillas, cambios de mano y otros adornos.
Naturalmente también imperfecciones y desacoples, producto de lo poco que torea en cantidad, aunque toree tanto en calidad. Su eterno problema con la espada, le privó de trofeo, como ya le sucedió con el primero, manso como todos a excepción del segundo, pero con mayor peligro. El Inclusero, ayuno de cerote, aguantó impávido los gañafones que su enemigo le tiró al flequillo, y expresó algunos arreboles artísticos más.
La antítesis
Pascual Gómez Jaén, ahora anunciado como Catraleño, es la antítesis. Un diestro trompo que a veces más semeja un espontáneo por sus zarrapastrosas maneras que recuerdan a El Cordobés. Aunque con la definitoria salvedad de que éste jamás vio un toro con los pitones como el segundo, cuyas agujas cosquilleaban el límpido cielo. Catraleño le atizó todo tipo de reolinas y mantazos, algunos extrañísimos y sin nombre, ¿catralinas?, pero siempre con un valor espartano. El sorullo circense bajó levemente y se aproximó algo más al clasicismo en el sexto, que le arrolló y envió a la enfermería. De allí salió bizarramente pero disminuido para pasaportar al toro.
Rafi de la Viña dio templadas y enrabietadas verónicas ganando terreno a sus dos bichos, con el añadido en el último de las largas cambiadas en posición de reclinatorio. Este postrero llegó al último tercio aplomado y sin un muletazo, a pesar del denuedo y valor del diestro. Tampoco con el tercero, que llegó entero y peligroso a la muleta, pudo de la Viña hacer otra cosa que demostrar arrojo y entrega.
Correas actuó en cuarto lugar y, con el caballo a guisa de muleta, colocó buenos arponazos, pero falló con el rejón de muerte.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Anthony Hopkins celebra 50 años de sobriedad: “La vida es mucho mejor”
Los análisis genéticos sugieren que el virus de la peste porcina no salió del laboratorio de la Generalitat que estaba a cientos de metros
El Maccabi, multado por la Euroliga con diez mil euros por cánticos contra el Valencia y su entrenador Pedro Martínez
El euríbor vuelve a subir y cierra con dudas un año agridulce para las hipotecas
Lo más visto
- La Audiencia Nacional avala la decisión de Robles de retirar el nombre de Franco a una bandera de la Legión
- Rusia amenaza con romper las negociaciones tras acusar a Ucrania de atacar una residencia de Putin
- Trump anuncia la destrucción de una “gran instalación“ vinculada a las drogas en Venezuela
- Alain Aspect, Nobel de Física: “Einstein era tan inteligente que habría tenido que reconocer el entrelazamiento cuántico”
- Robles exige a Feijóo que pida disculpas por decir que el Ejército no acudió en ayuda de las víctimas de la dana




























































