Coches no, gracias
Prohibido ir en coche. Este lema no escrito preside las recomendaciones de la Policía Municipal de Madrid para las miles de personas que acudirán esta noche y mañana a los dos conciertos de los Rolling Stones. Aunque muchos de los asistentes, a buen seguro, optarán por el vehículo propio para acceder al estadio Vicente Calderón, las medidas adoptadas por el Ayuntamiento no les facilitarán gran cosa la operación. Se trata, según la dirección de la Policía Municipal, de desviar a los espectadores hacia los medios de transporte público y evitar las aglomeraciones y los atascos de tráfico en las inmediaciones del estadio, situado junto a la carretera de circunvalación M-30.Para ello, la Policía Municipal cortará poco antes de las seis de la tarde, hora prevista también para la apertura al público de las puertas del Vicente Calderón, todas las calles adyacentes al estadio. Tan sólo permanecerá abierta al tráfico la vía de circunvalación M-30, aunque los agentes municipales recomiendan a los automovilistas que eviten circular por esta carretera a partir de esta hora, ya que se esperan fuertes retenciones. No se podrá circular ni aparcar en las calles de la Virgen del Puerto, Duque de Tovar y el túnel que pasa por debajo del estadio. Tampoco se podrá estacionar en el aparcamiento de tierra del Vicente Calderón, que queda reservado a los 60 remolques que transportan el equipo de los músicos británicos. Todas estas calles estarán valladas para impedir el paso de los posibles avispados que pretendan dejar allí el coche.
Autobuses y metro
El Ayuntamiento de Madrid recomienda el uso de los autobuses o el metro para acudir al estadio Vicente Calderón. Las líneas de la Empresa Municipal de Transportes que pasan más cerca del estadio rojiblanco son la 17, 23, 25, 34, 35, 36, 50, 116, 118 y 119. Los números de las líneas nocturnas de autobús, para poder volver después del concierto, son la N-7 y la N-8. La estación de metro más cercana es la de Pirámides, de la línea 5.Tampoco se aconseja comprar ningún tentempié ni bebidas en los posibles puestos ambulantes que se encuentren en las cercanías del estadio. Los agentes municipales vigilarán las proximidades del campo para evitar la colocación de estas paradas, sobre todo los dedicados a productos perecederos, como bocadillos, y a otros susceptibles de ser arrojados al escenario, como botes o botellas de cerveza o refrescos. Ninguno de estos puestos tiene permiso municipal para instalarse en la vía pública.
En resumen, un panorama nada alentador para los suicidas, según una expresión utilizada entre los responsables de la operación policial paralela al concierto. Aun así, y como último recurso, se puede dejar el coche en un aparcamiento público relativamente alejado del estadio, como los del Mercado Puerta de Toledo, puente de Segovia o Legazpi y cubrir andando los últimos cientos de metros hasta el campo del Atlético de Madrid.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.