El vampiro de Sevilla
La escritora Adelaida García Morales regresa con una novela sobre la atracción del abismo
Adelaida García Morales vuelve a las librerías tras cinco años de ausencia con una nueva novela, La lógica del vampiro. La autora de El Sur, Bene o El silencio de las sirenas regresa con un relato de estilo austero y sereno, ambientado en Sevilla y habitado bajo cuerda por los voraces sargazos del vampirismo psíquico. "Me interesaba la ambigüedad de las relaciones entre los personajes, el hecho de que todo quedara abierto a varias interpretaciones".
La lógica del vampiro narra la historia de una mujer de mediana edad que viaja a Sevilla tras recibir la noticia de la muerte de su hermano, y allí conoce a un hombre que parece ejercer un poder oculto sobre un grupo de amigos. Ella también se ve atraída por ese abismo, y un sentimiento fronterizo al amor, a la curiosidad, al miedo y a los celos la envuelve en un laberinto de desasosiego."Era una historia que me atrapó, aunque veía que quedaba muy fuera de lo que dicta la moda literaria", dice Adelaida García Morales. "Me inspiraron algunos testimonios que recogí de mujeres que se sentían víctimas de vampirismo psíquico por parte de algún hombre. Comprendí que, al tratarse de una experiencia interior, difícilmente traducible en términos de realidad objetiva, tendría que narrarla a través de la mirada subjetiva de la protagonista: la mirada de alguien que sufre, pero que está fascinado".
El vampiro de la novela no es, con todo, un personaje dotado del descomunal atractivo de un Drácula, ni la víctima un dechado de inocencia. "Traté de crear un hombre normal, incluso vulgar, cuyas palabras tanto pudieran leerse como provenientes de un vampiro psíquico como de alguien sin segundas intenciones. Le veo como una persona cuya estrategia manipuladora, que yo llamo lógica, le viene dada por su propia naturaleza: necesita, para sobrevivir, absorber la energía de sus amigos; aparentando ayudarles, los vacía y destruye. En cuanto a la protagonista, era importante que, precisamente mediante la vulgaridad del vampiro, se viese que era una mujer frágil, insegura, que en todo momento está preocupada por lo que de ella piensen ese hombre o los demás personajes".
Menos lirismo
El Sur, la película de Víctor Erice -pareja de Adelaida García Morales-, permitió al gran público conocer el mundo de una escritora secreta e insólita. En 1985 se publicaron los tres excelentes relatos que hasta hoy constituían la obra de una autora poco corriente. Un lustro puede parecer mucho tiempo de silencio literario: "He escrito La lógica del vampiro en circunstancias personales difíciles y con interrupciones. Pero desde el principio tenía claro el esquema de lo que quería contar y, aunque a la hora de escribir siempre hay cosas que se te cambian, me propuse lograr una novela menos lírica que mis narraciones anteriores y más ambigüa".Adelaida García Morales pertenece a la especie de escritores que, mientras trabaja en un relato, no dice oste ni moste sobre lo que se trae entre manos. "Pero soy capaz de leer novela sin que me influya".
Ahora piensa terminar un libro dee cuentos sobre personajes marginados. "Me interesa escribir novelas del tamaño de La lógica del vampiro (menos de 200 páginas), y desde luego el cuento por el juego que permite con las estructuras. Lo mío tengo claro que es la literatura y no el cine: un guión siempre es algo a medias, nunca está acabado". Varios cineastas se han interesado por las narraciones de Adelaida García Morales. Aparte de que El Sur se convirtió en película, algunos directores se acercaron a Bene y ahora el cineasta británico David Atwood trabaja en un guión basado en El silencio de las sirenas.
En el salón de la casa de la escritora, sintomáticamente, una reproducción de La chica del turbante, de Vermeer (una chica que es una mirada), está colgada junto a uno de los caprichos de Goya, esa vampírica zarabanda de enmascarados y enmascaradas que lleva por título Nadie se conoce.
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