_
_
_
_

Kohl accede a cambiar a la par los marcos 'pobres' de la RDA

Los devaluados marcos de los ciudadanos de la República Democrática Alemana (RDA) serán cambiados a la par por sus parientes ricos de la República Federal de Alemania cuando el próximo 2 de julio se produzca la unión monetaria entre ambos Estados. Kohl ha cedido ante sus aliados del Este ante las inminentes elecciones municipales. Por otra parte, la primera reunión de ministros de Exteriores de la conferencia dos más cuatro para la unificación germana se celebrará el 5 de mayo, dijo ayer en Bruselas Douglas Hurd, secretario del Foreign Office británico.

El primer ministro de la RDA, Lothar de Maiziere, llega hoy a Bonn para entrevistarse con el canciller Helmut Kohl, mientras que su ministro de Exteriores, el socialdemócrata Markus Meckel, lo hará con Hans-Dietrich Genscher.De vuelta de sus tradicionales vacaciones de Pascua en Austria, de las que acostumbra a traerse grandes decisiones, Kohl reunió el domingo a su Gabinete en Bonn, y ayer presidió otra reunión de las ejecutivas de los tres partidos que forman la coalición gobernante (CDU, CSU y FDP). De estos contactos salió la decisión de enfrentarse a las directrices del Bundesbank -el banco central de la RFA- y de la gran mayoría de los expertos económicos y adoptar el cambio de uno a uno para todos los salarios, las pensiones y las cuentas de ahorro -hasta 4.000 marcos- de los ciudadanos de la RDA cuando se produzca la unión monetaria, económica y social, antes de las vacaciones de verano, es decir, para el próximo 2 de julio.

La decisión puede ser calificada de sorpresiva, pese a que la presión política y electoral apuntaba en este sentido. Las elecciones municipales que tendrán lugar en la RDA el próximo día 6 de mayo, y en las que la credibilidad de la coalición gobernante en Berlín Oriental -especialmente de la alianza conservadora apadrinada por Kohl- estaba en juego, parecen haber inclinado la balanza y obligado al canciller a oponerse al poderoso Bundesbank, que había insistido últimamente en aplicar un cambio de dos marcos orientales por uno occidental, lo que provocó una visceral y masiva reacción contraria en Alemania Oriental.

Expertos económicos consultados indicaron que, descartado el recurso de la inflación, así como el de aumentar los impuestos -impensable en un año electoral-, el Gobierno federal se verá obligado a buscar financiación para la unificación.

Pasa a la página 3

La moneda no impedirá la unificación alemana

Viene de la primera página

La imposibilidad de emitir moneda para pagar la factura de unificación obligará a la RFA endeudarse para apuntalar el proceso, opinan los expertos, lo que daría oportunidad al banco federal -Bundesbank- de vengarse mediante un incremento de los tipos de interés para drenar los excedentes de dinero e impedir la presión inflacionista de los recursos que entren en la nación. Los tipos de interés que están ahora en torno al 10%, pueden llegar hasta un l2% o 13%.

El tratado entre las dos Alemanias en el que se establecerán los términos de la unión no ha sido oficialmente hecho público, aunque numerosas copias del mismo han circulado estos últimos días por las cancillerías de Bonn. Esta versión, que consta de 50 páginas y cinco apéndices, no incluía una definición final sobre el tema del cambio de la moneda, lo que posiblemente obligue ahora a introducir una serie de modificaciones y especificaciones.

Según el secretario general de la CDU, Volker Rühe, con el cambio de uno a uno los salarios de los alemanes orientales no serán modificados. Éste es uno de los puntos que pueden causar mayor fricción, dado que son sensiblemente menores, en cifras absolutas, a los de la RFA, lo que significa que, al desaparecer los subsidios a los precios y liberalizarse los mismos, el poder adquisitivo de los ciudadanos de la RDA se verá grandemente afectado.

Mejora de pensiones

Las pensiones, sin embargo, sí que serán aumentadas hasta alcanzar el 70% del sueldo percibido en el momento del retiro después de 45 años de cotizar. Las deudas de las empresas alemanas orientales, sin embargo, se someterán al cambio de dos por uno. En el mercado negro, el marco occidental se cotiza actualmente a cinco marcos orientales.

Sobre el tema de los ahorros, Rühe no tuvo reparos en admitir la realidad creada en Alemania Oriental cuando, presa del pánico, los ciudadanos empezaron a ingeniárselas para preservar su dinero.

"Cuatro mil marcos es más que suficiente", dijo, "porque significa que una pareja con dos hijos podrá cambiar a la par hasta 16.000 marcos, además de los que consiga con el cambio de dos a uno que se aplicará para el resto de los ahorros".

El Gobierno de Berlín Oriental hizo pública inmediatamente una nota en la que calificaba la propuesta de "una interesante oferta de negociación". Poco antes, el portavoz del Gobierno, Matthias Gehler, había dicho que la RDA quería iniciar esta misma semana las conversaciones para la unión económica, monetaria y social.

La decisión de ayer, junto con la llegada hoy a Bonn de De Maiziere para una reunión calificada como "de trabajo", abre ya definitivamente el último episodio para que en verano, al margen de la unión política, las dos Alemanias sean ya una sola. Ayer mismo, el Gobierno de la RDA, provisto de un nuevo incinerador, empezó a quemar su papel moneda.

Oficialmente se trata de "viejos papeles sin valor ya fuera de circulación", si bien las autoridades admitieron que el incinerador había sido adquirido para "dejar espacio libre para operaciones futuras".

Por otra parte, ayer en Luxemburgo, una reunión de ministros de Economía y Hacienda de la CE escuchó por boca del ministro de la RFA, Theo Waigel, la paridad cambiaria para la unión monetaria germana y las condiciones de la misma.

Declaraciones de Solchaga

El ministro español de Economía, Carlos Solchaga, dijo, tras la reunión, que la preocupación española ante la unificación alemana es similar a la del resto de los países de la CE; es decir, "lo que puede significar en inflación, incremento de tipos de interés y, eventualmente, en el control de los tipos de cambio".

"Los países de la CE debemos estar permanentemente informados de lo que se va decidiendo en tomo a la unificación alemana, pero hemos dejado claro que el proceso no puede interferir en el otro proceso emprendido, que es el de la unión económica y monetaria de la Comunidad".

"Pasará tiempo hasta que el flujo de inversiones hacia la actual RDA y el resto de los países del Este sea significativo, porque antes tendrán que transformarse en verdaderas economías de mercado susceptibles de atraer capitales privados", añadió Solchaga, según informó Efecom desde Luxemburgo.

Los ministros de Economía de la CE se reunieron ayer en Luxemburgo para discutir tres directivas sobre fiscalidad de empresas transnacionales, que están sobre la mesa desde hace casi dos décadas y cuya aprobación se ha visto bloqueada sistemáticamente por la negativa de la RFA a aceptar la eliminación del impuesto de sociedades sobre filiales en Alemania de multinacionales cuya sede está en otra nación europea. Al respecto, Solchaga dijo: "No se podrá alcanzar nunca el mercado único si no nos aproximamos en materia fiscal".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_