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Enfrentamiento en el Congreso por el encuentro González-Castro

El titular de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, y la diputada del Partido Popular (PP) Loyola de Palacio se enzarzaron ayer en una agria polémica sobre su apego a la democracia a raíz de una pregunta que le formuló al ministro sobre la reciente entrevista entre el presidente Felipe González y el líder cubano Fidel Castro.El jefe de la diplomacia española debió de considerar que la pregunta hecha en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso de los Diputados era lo suficientemente agresiva como para dejar de lado su habitual tono comedido y arremeter contra De Palacio, afirmando que él y el Gobierno "tenemos mucho más interés del que puede tener usted" en que "Cuba recupere la libertad y la democracia".

La diputada popular intentó responderle por alusiones personales, pero el presidente de la comisión, el socialista Luis Fajardo, le negó la palabra y le dijo incluso que sus numerosos intentos por conseguir el micrófono eran "molestos". El correligionario de De Palacio, Miguel Herrero de Miñón, pidió entonces que el acta de la sesión no recogiese esa palabra.

De Palacio se explayó después en los pasillos ante la Prensa, declarando que, a diferencia de Fernández Ordóñez, ella "no tenía nada que demostrar", porque "no he sido subsecretario con Franco", un cargo que desempeñó el ministro con el anterior régimen. "Los conversos son los peores", concluyó antes de anunciar que presentaría una protesta a través del cauce reglamentario por no haber sido autorizada a contestar.

Fernández Ordóñez acudió ante la comisión para dar cuenta de las últimas reuniones de ministros de Exteriores de la OTAN en Ottawa y de la Comunidad Europea en Dublín, pero al final de su intervención, De Palacio tomó la palabra para preguntarle por la entrevista celebrada entre González y Castro y puso de relieve que el presidente español evitara saludar al general chileno Augusto Pinochet pero no dudase en recibir en la Embajada de España en Brasilia a un líder máximo que insulta ahora al Rey de España como lo hizo en su día con el presidente del Congreso, Félix Pons.

A renglón seguido criticó la cooperación que el Gobierno desarrolla con La Habana, y acabó sosteniendo que la comparación que hizo González entre la actitud de Castro y la resistencia numantina era "un ejemplo mal elegido" porque en el caso de Numancia y Sagunto "se trataba de la defensa de un pueblo y de sus libertades" lo que, según ella, no sucede en Cuba.

El saludo a Pinochet

"Ya sé que le preocupa mucho que no se haya saludado a Pinochet", ironizó Fernández Ordóñez en su respuesta, y aseguró que si no se produjo el encuentro fue por razones de agenda al llegar González, justo después del traspaso de poderes al nuevo presidente. "Nos dio tiempo, en cambio, a asistir en el estadio de Santiago donde Pinochet encerró a sus víctimas", prosiguió el ministro, al emotivo acto multitudinario en el que el presidente Patricio Aylwin pronunció un discurso. "Es una pena que ese día en el que renació la democracia en Chile no hubiese allí nadie del PP".

Sobre la entrevista entre González y Castro, el jefe de la diplomacia española no dio ningún detalle suplementario, pero sí aseguró que se celebró "con conocimiento y asentimiento de todos los líderes occidentales que estaban allí (en Brasilia), incluido el vicepresidente de EE UU, Dan Quayle".

En cuanto a la cooperación con Cuba, el ministro sostuvo que se limitaba a la biotécnica y los créditos concedidos sólo para la compra de productos españoles. "Si la oposición del PP pretende que se supriman esos créditos a la exportación española, nos gustaría que lo diga públicamente".

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