El secretario de Estado de Hacienda asegura que el País Vasco no puede convertirse "en el Luxemburgo interior"

El secretario de Estado de Hacienda, José Borrell, afirmó ayer en los pasillos del Congreso que "el País Vasco no puede convertirse en el Luxemburgo interior" (único país de la Comunidad Europea donde existe el secreto bancario). El conflicto entre la Administración central y la comunidad autónoma vasca por la emisión de pagarés forales opacos fiscalmente "está en fase de contactos explicativos", y hasta ver cómo terminan "no diré lo que pienso al respecto".Borrell realizó estas declaraciones al término de su comparecencia ante la Comisión de Presupuestos del Congreso. El secretario de Estado no consideró necesario un ajuste fiscal este año a través de un aumento de los tipos del IVA, como demandan algunos sectores sociales, "porque la situación está controlada". Añadió que "sería un mal negocio con los niveles actuales de fraude", aunque explicó que será necesario subir el IVA antes de 1992.

Para Borrell, "la sociedad española está inmersa en el fraude fiscal hasta las orejas". Añadió que existe una connivencia social con esta actitud, "como lo demuestran las críticas ante la implantación del número de identificación fiscal [NIF]". "¿Quién teme al NIF? Desde luego, no son los trabajadores con nómina, sino algunos miles de personas que son titulares de primas únicas o de cesiones de créditos, a quienes todavía no tenemos identificados", afirmó.

Borrell volvió a explicar que el NIF sólo pretende perfeccionar los actuales sistemas de identificación de los contribuyentes, y ello no constituye un atentado contra el derecho a la intimidad. "En este país hay mucho ácrata de salón, enamorado de su ombligo, y que tiene un concepto narcisista del derecho a la intimidad", explicó.

Durante la comparecencia del secretario general de Hacienda, Jaime Gaiteiro, el representante del Grupo Popular planteó la pregunta de si se estaba investigando fiscalmente a Juan Guerra. Antes de que Gaiteiro respondiera, el presidente de la Comisión de Presupuestos, también diputado del PP, Rodolfó Martín Villa, desestimó la oportunidad de la pregunta.

Cuando Gaiteiro hizo uso de la palabra explicó que Hacienda no proporciona información pública sobre ningún ciudadano particular. Sin embargo, aprovechó la ocasión para lanzar sobre la arena la conveniencia de cortar una práctica más o menos habitual que consiste en que, cuando Hacienda envía una citación por correo, el destinatario no hace acuse de recibo y se apresura a realizar una declaración complementaria, de forma que así se evita las sanciones.

El interventor general del Estado, Juan Aracil, apoyó -tras su intervención en la Comisión de Presupuestos- la iniciativa insinuada por Borrell de introducir el control de las subvenciones en la actual ley de Presupuestos. "Lo consideraríamos muy positivo", aseguró. En opinión de Aracil, "ahora debería ampliarse la actual regulación a través de la ley de Presupuestos, para en un medio plazo -tres o cinco años- elaborar una ley específica que regule todo el fenómeno de las subvenciones".