Violeta Chamorro envía a EE UU una delegación en busca de ayuda económica
La presidenta electa de Nicaragua, Violeta Chamorro, enviará la semana próxima a EE UU una comisión, encabezada por su asesor económico, Francisco Mayorga, en busca de los 600 millones de dólares que, según los expertos de la Unión Nacional Opositora (UNO), necesita el país centroamericano para iniciar su recuperación.
Los dirigentes de la coalición ganadora realizan, al mismo tiempo, gestiones para que la Unión Soviética mantenga la ayuda que durante el régimen sandinista ha facilitado a este país.La comisión encabezada por Mayorga, asesor de la presidenta electa y autor del programa económico de la coalición, manifestó que su gestión en Washington será "exploratoria", aunque otras fuentes han explicado que pretende saber con cuánto dinero fresco podría contar inmediatamente para respaldar la nueva moneda que el Gobierno de la UNO pondrá en circulación: el córdoba oro.
Medios financieros de Managua, tanto los próximos al actual Gobierno como a la UNO, consideran que Violeta Chamorro no va a tener gran dificultad para encontrar el primer paquete de 600 millones de dólares que necesita para poner cierto orden en la economía, ya que tanto el Gobierno de Estados Unidos como los de Japón y la República Federal de Alemania han dado buenas señales en ese sentido.
Todos los observadores son, sin embargo, más pesimista sobre la posibilidad de encontrar una fuente estable de financiación, puesto que eso exigiría un acuerdo con organismos internacionales y la aplicación en Nicaragua de planes económicos de ajuste que minarían el actual respaldo popular a Chamorro.
El diario oficial del Frente Sandinista de Liberación Nacional publicaba ayer a toda plana la información sobre la huelga de hambre iniciada por el presidente de Panamá, Guillermo Endara, para que Washington entregue la ayuda económica prometida. El periódico relacionaba esta foto con el viaje de Mayorga a EE UU. "¿Si no consigue suficiente también se pondrá en ayuno?", se preguntaba el periódico sandinista.
Clima apacible
Dentro de las conversaciones para la transición, el clima es apacible. Incluso se menciona la posibilidad de que el presidente Daniel Ortega pida a la URSS que mantenga el grueso de su actual ayuda, fundamentalmente el abastecimiento de petróleo. Fuentes de la UNO aseguran que no se ha iniciado una negociación concreta en ese sentido, aunque valoran como positivo un mensaje del Gobierno soviético en el que anuncia que cumplirá los compromisos acordados con el Gobierno sandinista.
Confirmando el buen clima político actual, las autoridades sandinistas tienen incluso intención de convencer a los cooperantes extranjeros para que sigan trabajando en Nicaragua, aunque no sea bajo órdenes del Gobierno sino de organismos privados. El presidente Daniel Ortega se entrevistó el miércoles pasado con más de 1.500 de los que aquí llaman internacionalistas con el fin de agradecerles la colaboración de estos años pasados y ponerles al día sobre la situación del país.
Muchos de ellos, que han colaborado más con el corazón que con el trabajo, están resueltos a abandonar el país. Pero otros muchos, entre los que se encuentran médicos y maestros enviados por la cooperación española, quieren seguir cumpliendo con su labor en Nicaragua.
El ambiente del país es, sin duda, proclive a ello. Daniel Ortega está tratando de consolidar una especie de frente nacional con la UNO en respuesta a la contra y a la eventual presión norteamericana. En los dos bandos hay sectores partidarios de ello. No hace falta más que comprobar el tono de los periódicos de una y otra fuerza: moderación, entendimiento y sólo pequeñas ironías críticas. Al fin y al cabo, las familias siempre terminan entendiéndose.
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